25 de febrero de 2012

BATMAN FOREVER (1995)















Tres años después de Batman Vuelve (1992), llegó a los cines la esperada tercera entrega de Batman; y lo hizo con varios cambios. Aquí había nuevo director, el hombre murciélago tenía un nuevo rostro, había un nuevo estilo y hasta la banda sonora cambiaba.


¿Resultado? Un enorme éxito de taquilla, pero un enorme bajón con respecto a la calidad de la saga y el inicio del declive de esta.

Aún así, debo decir que esta película no me desagrada del todo. Puede que esté entre las peores películas de Batman que se han hecho pero, aún así, no la encuentro del todo mala, mas bien, regulera. Además, si la comparamos con su nefasta hermana pequeña, diríamos que hasta mejora. Pero, bueno, de todo esto hablaré mas adelante.



La película comienza con Batman (Val Kilmer) enfrentándose a un nuevo enemigo. Se trata de Dos Caras (Tommy Lee Jones), que es como se hace llamar ahora Harvey Dent, el antiguo fiscal de Gotham City ahora convertido en un criminal y líder de una peligrosa banda que le ha declarado la guerra al hombre murciélago, ya que le acusa de ser el responsable de que la mitad de su cara se desfigurara a causa de un ataque con ácido durante un juicio contra el líder mafioso Salvatore Maroni. Esto le hace tenderle trampas en cada uno de sus golpes que Batman sortea con éxito. Su obsesión por matar a Batman lleva a Dos Caras a secuestrar un circo lleno de gente y colocar una bomba que estallará matando a todos los presentes si Batman no se entrega. Una familia de trapecistas consigue sacar la bomba de allí antes de que explote, pero estos son asesinados después por Dos Caras, que mata a todos menos al hijo pequeño, Dick Grayson (Chris O´Donnell). Batman se siente culpable por lo sucedido, por lo que, como Bruce Wayne, decide acoger al chico bajo su tutela; pero el joven solo desea vengarse.

Por su parte, Edward Nygma (Jim Carrey), un científico que trabaja en Industrias Wayne, está sacando adelante en secreto con un proyecto consistente en crear una Tv en 3D a base de controlar las ondas cerebrales y que el propio Bruce Wayne había rechazado. No obstante, un error en el desarrollo hace que el invento de Nygma se convierta en una poderosa arma capaz de hacerle mas inteligente a base de robar la inteligencia a otros, algo que puede llevarle a controlar todas las mentes de la ciudad; y puede que del mundo. Necesitado de dinero para sacar adelante su megalómano proyecto, adopta la identidad de Enigma y se alía con Dos Caras, a quién le promete la cabeza de Batman si le ayuda. Batman, por su parte, empieza a replantearse el seguir siendo un superheroe a la vez que no desea que el joven Dick siga sus pasos y de querer sacar adelante una relación amorosa que mantiene con la bella psiquiatra Chase Meridian (Nicole Kidman).

En un principio, estaba previsto que fuera Tim Burton quién dirigiera esta tercera entrega. No obstante, aunque Batman Vuelve fue un éxito de taquilla, muchos la encontraron demasiado oscura. Entre ellos la Warner, que consideraba que esto fue la razón de que la película tuviera un éxito muy inferior al de su predecesora, Batman (1989). Fue por ello por lo que, esta vez, decidieron relegarle a productor y buscar un nuevo director, siendo elegido Joel Schumacher. Este, en un principio, quería hacer una precuela inspirada en el cómic Batman: Año Uno, de Frank Miller, pero el estudio no quería una precuela, sino continuar la historia hacia delante y seguir con la idea que tenía Burton, con Batman enfrentándose a Enigma y al regreso de Catwoman; aunque, finalmente, esta fue desechada del guión y reemplazada por Dos Caras.

Este cambio en la dirección sirvió de excusa a Michael Keaton para no repetir como Batman. El actor ya estaba cansado del personaje y de ver como secundarios de lujo le quitaban el protagonismo. Así que, excusándose con lo de Burton, se negó a ponerse el traje de Batman por tercera vez a pesar de lo 15 millones de dólares que la Warner le ofrecía. Fueron varios los actores que se tantearon para el papel (Ralph Fiennes, Daniel Day-Lewis, Johnny Depp...) hasta que Val Kilmer resultó ser el gran elegido.



Otro papel muy codiciado fue el de Robin, quién hacía aquí su primera aparición. Cabe decir que en Batman Vuelve estaba también prevista la participación de este personaje, incluso aparecía en los primeros borradores del guión, pero fue desechado y sería en este film donde le veríamos por primera vez. Leonardo DiCaprio y Marlon Wayans –si, pudieron haber metido un Robin negro en la película –fueron dos firmes candidatos junto a Chris O´Donnell, quién terminó haciéndose con el papel.

La película fue todo un éxito. Con un presupuesto de 100 millones de dólares, hizo 184 millones solo en EEUU y 152 millones en el resto de países, logrando una recaudación mundial de 336 millones de dólares; cifra que superó a los 266 millones de Batman Vuelve. Por otro lado, la crítica la recibió con opiniones muy enfrentadas. Algunos la criticaban duramente mientras otros la adoraban afirmando que Schumacher le había dado un nuevo aire a la saga.

Por su parte, los fans de Batman –al menos, la mayoría de ellos –considera esta película un insulto, tanto para el personaje, como para los cómics en general.

Yo fui a ver esta película en su día al cine y recuerdo que flipé bastante viéndola. Tenía 15 años, era algo mas mayor, pero mi cerebro de adolescente hacía que aún me impresionara fácilmente. No obstante, recuerdo que con lo que mas flipé fue con los efectos especiales, las escenas de acción y, sobre todo, con Nicole Kidman y Debi Mazar –a Drew Barrimore no la nombro porque en esta película está de todo menos sexy –. Con lo que menos flipé fue con Batman, con Robin –bueno, con este no flipo nunca –y con los villanos.

Y es que, tenemos una película que, visualmente, puede resultar muy atractiva para el gran público, pero que es una pésima adaptación de cómic y, como película, es tan solo un divertimento difícilmente de tomar en serio.

Salvo por algunos detalles y algunos actores que repiten, la película casi ignora las dos primeras entregas. Y, como adaptación, se toma un montón de libertades con respecto a los cómics; algunas de ellas heredadas de las anteriores películas. Si en la primera entrega era el Joker quién mataba a los padres de Batman, aquí es Dos Caras quién asesina a la familia de Robin en lugar de Tony Zucco, el asesino de los cómics.



Como ya he dicho, flipé con los efectos especiales y las escenas de acción, porque están de lo mas logrados. Escenas como la del helicóptero o esa en la que Batman salta desde lo alto de un edificio –donde, por cierto, se empleó un Batman generado completamente por ordenador –son de lo mas espectaculares. También las escenas de lucha son muy buenas y están bien rodadas. Hasta aquí, todo bien.

Otro punto es el diseño de producción.

Debo decir que no está mal esa Gotham City con un estilo mezcla entre clásico y futurista. Aunque llega a resultar un tanto acartonado y los colorines y las luces de neón que Schumacher se empeña en meter lo estropean el conjunto. Aunque, debo decir que aquí todos estos elementos se hacen algo mas digeribles en comparación con la siguiente entrega.

El diseño del traje de Batman, aunque inferior a los anteriores, no está mal; además, los pezones Made in Schumacher –que tanta polémica despertarían en el futuro –, aquí pasan algo mas desapercibidos. Tampoco está mal el traje de Robin, muy parecido al traje clásico, aunque con un estilo mas moderno; eso si, demasiados músculos para tan poca cosa. También me gusta el diseño del nuevo Batmóvil, aunque muy inferior al de las anteriores películas; además de que se podrían haber ahorrado esas cubiertas en las ruedas con forma de Batseñal. Mas logrados están el nuevo Batskiboat y el nuevo Batwing; sobre todo, este último.

Se dice que Burton a penas tomó decisiones en esta película, pero yo veo bastante de su mano como productor; sobre todo, en lo que a Batman se refiere. A pesar de las payasadas del guión, los colorines y las luces de neón, Batman sigue estando rodeado de oscuridad; como si todos estos elementos no le afectasen.

El problema es el propio Batman en si. Desde luego, fue un error la elección de Val Kilmer. El tipo no es mal actor, pero no da nada el pego, ni como Batman, ni como Bruce Wayne. Michael Keaton no fue un buen Bruce Wayne, pero si estaba genial enfundado en el traje de Batman. Kilmer, en cambio, a pesar de que el traje le sentaba mejor –ni tan siquiera necesitó relleno en los músculos –, se ve que tanto el traje como el personaje le vienen -simbólicamente -grandes.


Otro fallo garrafal es Robin. Ya me fastidia bastante que metan a este personaje, el cual nunca me ha gustado, pero que, encima, lo interprete un carapán como Chris O´Donnell...

En cuanto a los dos villanos, esto si me da rabia.

Me da rabia porque la elección de los actores es muy buena. Tommy Lee Jones es un excelente actor y Jim Carrey, a pesar de darse a conocer con payasadas como La Máscara o Dos tontos muy tontos, también es un actor muy bueno. Además, los dos pegan mucho con sus respectivos personajes: Dos Caras y Enigma. El problema es lo mal tratados que están los personajes en el deficiente guión, que los convierte en un par de payasos que se comportan como retrasados mentales durante todo el metraje y que están a años luz de sus homólogos en el cómic. Es imposible tomarse a ambos en serio como supervillanos cuando en este tipo de películas los villanos son un punto muy importante.

No tengo ninguna duda de que, con un guión en condiciones, una buena dirección de actores y una caracterización mas lograda –porque la que tienen en la película es para echarse a reír; en el peor de los sentidos –, Jones y Carrey hubieran sido unos excelentes Dos Caras y Enigma.

La otra cara de la moneda es la protagonista femenina. Nicole Kidman es una excelente actriz y está realmente fantástica como Chase Meridian –un personaje inventado para la película –. Muy bella, sexy y provocadora, como una mujer fatal del cine negro mas clásico que no cuesta creerse nada que sea capaz de seducir a Batman o cualquier superheroe que se le cruce en su camino. Desde luego, ella es de lo mejor del film.

De las anteriores películas vuelven a repetir Michael Gough, que vuelve a estar genial como Alfred –a pesar de las tonterías que le hacen decir, como el chiste del bocadillo del principio –, y Pat Hingle, que vuelve a hacer un buen trabajo como Gordon; personaje que sigue siendo tratado como un secundario del tres al cuarto a pesar de su importancia en los cómics.

Resumiendo.


La película, como adaptación de Batman, es pésima. No solo ignora los cómics, también se pasa por el forro a sus dos predecesoras. Eso sin mencionar el mal trato que dan a varios de sus personajes –lo que ya he dicho de los villanos principales –. Aún así, debo decir que, por primera vez, se intenta profundizar en la mente y la personalidad de Batman, mostrando sus demonios internos y sus motivaciones para hacer lo que hace. Pero, sin embargo, la cosa se queda en eso, en un simple intento que, al final, no llega a nada; bien porque no quisieron llegar –porque hay muchas escenas eliminadas del montaje final que ayudaría a comprender todo esto –o porque Schumacher no supo como sacarlo adelante. Las dos opciones me parecen válidas.

Como adaptación es mala, pero como película llega a resultar divertida y entretenida; eso si, siempre que no te la tomes en serio y la veas mas como una parodia. Esto hace que la salve de la quema y, al menos, la coloque entre las regulares. Mas bien, regular tirando a mala.



Y, como ya he dicho, si la comparamos con la que vino después, hasta sale ganando.






4 comentarios:

Jack Napier dijo...

Al fin la hiciste y me encanto, como todas.

Como dices, esta pelicula tubo la desgracia de heredar cosas de la primera y encima no se le dio el bastanta jugo. Como dijiste, en la primera, Batman asesina al Joker porque este mato a sus padres. Y en esta, Robin quiere matar a Dos Caras porque este mato a sus padres.

Si esta fuera una buena pelicula, hubieramos visto que Dick (Robin) Salvaba de la caida a Dos Caras y lo enviaba a Arkham...Peeeeeeeeeeeero ambos sabemos que pasa.

Y aqui se repite de nuevo el tema de "matar villanos"...pero no del todo.

Vemos morir a Dos Caras pero Enigma, todavia me estrujo el cerebro para saber como mierda Batman no lo mato, termina en Arkham.

Me dio bastante rabia y curiosidad...pues Batman se cargo a grandes villanos y dejo al mas subnormal de la saga Vivo y coleando...

Ahora te toca vertelas con Batman y Robin (Te recomiendo tomes practicas de Yoga para relajarte, porque la 4ª de batman te hara agarrar un machete y destrozar la TV).

XD

Bueno saludos ;)

PD: Encontre el verdadero guion de Batman 1989, y eche un vistazo al final original que estaba prev isto...y creeme, era muchisimo mejor que el de la pelicula.

Lo pondre en mi blog, y hablare de él.

Aqui un adelanto:

En el final del guion, El Joker no cogia a Vicky Vale para llevarla a la catedral, porque fue envestido por la policia de Gotham, que empezaron a dispararle, pero este se metio dentro de la catedral y batman fue a por su encuentro.

Proximamente mas...

AXA dijo...

Muchas gracias.

Con Batman y Robin ya estoy manos a la obra; mas que nada, para quitármela de encima cuanto antes. Y no te preocupes, ya tengo la preparación necesaria

En cuanto pueda me paso por tu blog para ver ese guión. No tengo duda de que ese final hubiera sido mejor; de momento, que el Joker no secuestre a Vikky ya es un acierto.

Nancy Callahan dijo...

"Una pésima adaptación de cómic y, como película, es tan solo un divertimento difícilmente de tomar en serio".

Una buena forma de resumirlo. A mí como película me parece entretenida, pero poco más, y los villanos, como bien dices, son casi como una parodia, como dos niños grandes haciendo travesuras.

En fin, gran artículo ;)

AXA dijo...

Muchas gracias, Nancy.