Dentro de unos meses se estrena
la esperada X-Men: Días del Futuro Pasado,
así que voy a analizar las películas de X-Men que ha habido hasta entonces; con
excepción de X-Men: First Class (Matthew Vaughn, 2011), la cual ya analicé en su día.
Y comienzo por la primera de
todas, el film con lo que los famosos mutantes debutaron en el cine hace 14
años, una época en la que las películas de superhéroes no estaban tan a la orden
del día como ahora.
La historia comienza en 1944, en
la Polonia ocupada por los nazis. Varios judíos son encerrados en un campo de
concentración. Entre ellos se encuentra Erik Lehnsherr (Brett Morris), un joven
de 13 años que es separado de sus padres. En esos momentos empieza a manifestar
unos extraños poderes magnéticos. Muchos años después, en un futuro cercano, en
EEUU se está debatiendo una ley en el Congreso que obligue a los mutantes a registrarse
y hacer públicas sus identidades. Los mutantes no ven bien esta ley, ya que se
exponen a un gran rechazo social, pero el senador Robert Kelly (Bruce Davison),
un fanático anti-mutantes que goza de una gran influencia, apoya firmemente
esta ley. En medio de todo esto, Marie (Anna Paquin), una joven de 17 años, se
ve obligada a huir de casa cuando sus poderes mutantes se manifiestan mientras
besa a su novio, al que deja en coma. En su huida, Marie adopta el nombre de
Pícara y llega a Canadá, país que siempre ha querido visitar, encontrándose con
otro mutante, Lobezno (Hugh Jackman), quién accede a llevarla con él.
Durante el trayecto son atacados
por otro mutante, Dientes de Sable (Tayler Mane), pero son rescatados por
Cíclope (James Marsden) y Tormenta (Halle Berry), dos mutantes al servicio del
profesor Charles Xavier (Patrick Stewart), un poderoso mutante telequinético
que desea la paz y la convivencia entre humanos y mutantes mientras dirige una
escuela para mutantes sin hogar donde son llevados. Pícara rápidamente se
integra en ese lugar, aunque Lobezno, un espíritu libre, tiene sus reservas y
solo accede a quedarse porque Xavier puede hacerle recordar su pasado.
Mientras, Dientes de Sable cumplía órdenes de Erik Lehnsherr (Ian McKellen),
ahora convertido en un poderoso mutante conocido como Magneto que odia
completamente a los humanos y, al frente de su organización, también compuesta
por Mística (Rebecca Romijn) y Sapo (Ray Park), trama un plan para conseguir la
supremacía mutante.
Los primeros intentos de realizar
una película de los X-Men datan de 1989, cuando Stan Lee y Chris Claremont
emprendieron conversaciones con James Cameron y el estudio Carolco para
realizar la futura película. Sin embargo, la cosa al final se quedó en nada
cuando cayó en manos de Carolco la posibilidad de hacer una película sobre
Spiderman.
Después, tras un fallido intento con
Sony, en 1994 lograron venderle los derechos a la 20th Century Fox. La
productora Lauren Shuler Donner fue la encargada de comprar los derechos para
ellos, por lo que el estudio la puso al frente del proyecto cinematográfico.
Andrew Kevin Walker fue el primer
guionista contratado, escribiendo un extenso guión donde aparecían muchos
personajes, elementos como los Centinelas o la Sala del Peligro y un ambicioso
plan por parte de Magneto para convertir Manhattan en una nación mutante. En
los años siguientes, este guión fue pasando por las manos de guionistas como
John Logan, James Schamus o Joss Whedon mientras que la dirección, aunque en un
principio se tanteó a Robert Rodriguez, finalmente recayó en Bryan Singer.
Después del éxito de Sospechosos Habituales (1995), Singer
estaba interesado en dirigir un proyecto de ciencia ficción. En un principio,
la Fox le propuso dirigir Alien
Resurrección (1997), pero Singer no estaba muy interesado. Entonces, le
salieron con el proyecto de X-Men.
Singer, en un principio, declinó esta oferta, ya que no le gustaban los cómics,
los cuales consideraba lecturas poco inteligentes. Sin embargo, pronto se dio
cuenta de las connotaciones políticas que contenían estos cómics –creados a
principios de los años 60, cuando EEUU vivía una convulsa época de luchas
raciales –y, partiendo de un borrador escrito por Ed Solomon en 1997, ideó un
argumento junto al productor Tom DeSanto donde Charles Xavier y Magneto eran
representados como unos modernos Martin Luther King y Malcolm X.
Christopher McQuarrier, que ya
había trabajado con Singer en Sospechosos
Habituales, fue el encargado de escribir el guión, el cual fue reescrito
posteriormente por David Hayter, único guionista que aparecería acreditado.
La producción de la película, que
originalmente debía estrenarse en 1998, no estuvo exenta de problemas. Para
empezar, sufrió un gran retraso que permitió a Singer rodar la película Verano de Corrupción (1998). Luego, la Fox, muy desconfiada con el
proyecto, redujo el presupuesto a 75 millones de dólares, lo que obligó a
suprimir muchos personajes y subtramas, haciendo una película más sencilla de
lo que originalmente estaba pensado.
Aún así, la película siguió
adelante y quedó lista para estrenarse en el verano de 2000, convirtiéndose en
un gran éxito. Solo en EEUU hizo 157 millones de dólares y su recaudación
mundial estuvo cerca de llegar a los 300 millones. Además, la película fue muy
bien recibida por crítica y público y se convertiría, junto con la anterior Blade (Stephen Norrington, 1998) y la
posterior Spiderman (Sam Raimi,
2002), en la gran impulsora de las adaptaciones de cómic que vivimos
actualmente.
Y a todo esto, ¿Qué opino yo de
este film?
Recuerdo que en su día esperé
esta película como agua de mayo y con mucha ilusión, ya que tenía muchas ganas
de ver a los X-Men en el cine.
Cuando por fin la vi –la espera a
que se estrenara en España fue muy larga, llegando el 3 de octubre cuando se
había estrenado en EEUU a mediados de julio –, recuerdo que me gustó. Aunque
también me llevé una pequeña decepción, ya que me esperaba una película mucho
más espectacular y con más acción. Porque la película tiene muy poca acción,
incluso menos que Superman Returns -para que luego digan los defensores de esa película que no gustó solamente porque tenía poca acción -.
Pero esto se debía a los muchos
recortes que hizo la Fox, lo cual obligó a hacer la película menos espectacular
de lo que estaba prevista; como ya he mencionado antes. Más delito tiene Superman Returns, donde Singer contó con
un presupuesto mucho más abultado –los famosos 250 millones de dólares –y una
gran libertad.
Dejando a un lado la impresión
inicial, la película me parece muy buena y una estupenda adaptación de cómic.
Se toma muchas libertades, no lo voy a negar, pero capta muy bien la esencia de
los cómics de la Patrulla X y mantiene muy bien estructurada su historia y a sus
personajes.
Donde más libertades se toman es
en el vestuario. A Singer no le gustaban los trajes de licra coloreados que los
personajes utilizan en los cómics –les hacían parecer cheerleader de los Power
Ranger, según él –, por lo que optó por cambiarlos por unos trajes de cuero
negro.
A mí, la verdad, me hubiera
gustado ver a los mutantes con trajes mas asemejados a los de las viñetas, no
lo voy a negar. Pero, como digo siempre, no soy nada purista y tolero los
cambios siempre que el resultado sea bueno. Y aquí, desde luego, lo es. Los
trajes que llevan aquí los protagonistas me gustan bastante, especialmente, el
de Lobezno; aunque, eso sí, echo de menos su máscara, de la cual prescindieron
totalmente.
Por lo demás, la película está
muy bien. Tecnicamente, es brillante. El diseño de producción es alucinante, recreando
muy bien los elementos de la escuela mutante, como la base subterránea, Cerebro
–el cual es impresionante –o el famoso jet. Los efectos especiales no están tan
pulidos como deberían, pero funcionan muy bien y, además, acompañan muy bien la
historia si adueñarse de ella.
Todo funciona muy bien en este
film. La fotografía está muy lograda, el ritmo no decae en ningún momento y, a
pesar de su falta de acción, la película se disfruta bastante gracias,
especialmente, a un guión muy bien elaborado –cuesta creer que tuviera tantas
reescrituras –y la eficaz dirección de Snyder.
También el trabajo de los actores
es un punto a favor.
Patrick Stewart fue una muy buena
elección como Charles Xavier, porque hace un estupendo trabajo. Se dice que su
elección, como la de otros personajes, se hizo teniendo en cuenta las opiniones
de los fans en internet y yo, desde luego, doy crédito a esto, porque varios
años antes de que se hiciera la película siempre pensaba en este actor como
Profesor X cuando imaginaba una película de X-Men. Así que imaginad mi sorpresa
cuando vi que era el elegido.
Al principio no imaginaba a Ian McKellen como Magneto, ya que físicamente no encajaba mucho, puesto que Magneto es un tipo mucho más alto y fuerte. Sin embargo, lo que importa es la interpretación y en eso McKellen, un actor excelente, sale ganando dando vida a un estupendo Magneto tan amenazador como en los cómics.
Famke Janssen está realmente fantástica como Jean Grey. La tía es una estupenda actriz y aquí hace una de sus mejores interpretaciones. Cuando vi la película por primera vez no hacía más que comparar este personaje con el de la sádica asesina que interpretó en Goldeneye (Martin Campbell, 1995), porque parecía que las dos hubieran estado interpretadas por dos actrices distintas.
Halle Berry no es santa de mi devoción, como ya he dejado claro en otras ocasiones, pero debo admitir que aquí no lo hace mal del todo como Tormenta.
Tampoco es santo de mi devoción
James Marsden, pero para un personaje tan repelente como Cíclope –siempre ha
sido el personaje que menos me ha gustado –encaja muy bien.
Rebecca Romijn está fantástica
como Mística y se desenvuelve muy bien en las escenas de acción. El único
defecto que le encuentro es en el maquillaje, el cual no está lo suficientemente
pulido en la parte del rostro; por suerte, este es un defecto que corrigieron
en las siguientes entregas.
El personaje de Pícara es el que
sufre más modificaciones e. incluso, le añadieron una mezcla de elementos de
otros personajes, como Júbilo o Kitty Pryde –aunque esta última aparece
brevemente en la película interpretada por Sumela Kay –. Aunque yo por aquella
época tenía el deseo de ver una Pícara como la de la serie de animación de los
90 interpretada por Denise Richards esta Pícara interpretada por Anna Paquin me
pareció sensacional y todavía me lo parecer. La oscarizada actriz hace un
trabajo estupendo y resulta de lo mas convincente.
Ray Park y Tayler Mane están muy
bien como Sapo y Dientes de Sable, respectivamente, aunque ambos están bastante
desaprovechados. Lo mismo que Bruce Davison como el Senador Kelly, a pesar de
que este personaje tiene bastante importancia en la trama. Además, me pareció
un error que lo mataran, ya que hubiera estado mejor el que sobreviviera y
cambiara públicamente su opinión sobre los mutantes; algo que hacen en la
película, aunque no es exactamente el Senador Kelly quién lo hace.
Y, guardando lo mejor para el
final, hablo del que ha sido siempre mi personaje favorito de esta franquicia:
Lobezno.
El mayor temor que tenía era que
actor iba a interpretarlo. Yo tenía idealizado para este papel a alguien como
Harvey Keitel, un gran actor que, además, encajaba bastante físicamente con el
personaje. No obstante, el estudio prefería más a Russell Crowe, lo cual
también me pareció una decisión muy acertada. Sin embargo, Crowe rechazó el
papel y este recayó en el actor Dougray Scott. Pero, este también terminó
rechazando el papel porque la producción de esta película coincidía con la de Mission: Impossible II (John Woo, 2000),
donde daba vida al villano principal.
Finalmente, el gran elegido
resultó ser Hugh Jackman, un actor completamente desconocido por aquel
entonces.
Yo, en su día, no lo consideré
una buena elección, lo admito; ya sabéis que nunca me avergüenza admitir cuando
me equivoco. Cuando lo veía en las
imágenes no me convencía su caracterización y encontraba su imagen demasiado
suave, no tan ruda como el personaje requería. Me hubiera gustado verlo en
acción en algún tráiler, pero esta es una de las pocas películas de las que no
vi ningún tráiler de ella antes de verla, en serio. Y no fue porque no
quisiera. En aquella época no tenía internet en mi casa y solo podía ver los
tráilers en el cine. Sin embargo, los cines a los que iba no proyectaban ningún
tráiler de esta película y lo único que podía ver eran escenas salteadas en los
programas de Tv.
Una vez vista la película, pude
comprobar lo mucho que me había equivocado con este actor, quién resultó ser un
gran descubrimiento. Hace suyo al personaje desde el primer momento y se
apodera de cada escena en todo momento, todo gracias a una interpretación extraordinario
que dota al personaje de mucha personalidad. Se puede decir que el tipo se
apodera de la película de la misma forma que su homólogo de los cómics se
apoderaba de las historietas.
Sobre los puntos negativos de
este film, además de la poca acción y la casi falta de espectacularidad, está
el hecho de que, a pesar de su duración de 104 minutos, la película se pasa muy
rápido y se hace muy corta –da la sensación de ver una película de 80 minutos o
menos –. A lo largo de la película el ritmo no decae, como ya he mencionado
antes, pero una vez que termina te deja con la sensación de “¿Ya está?”.
También se echan en falta mas personajes, pero esto es algo que arreglan en el futuro.
También se echan en falta mas personajes, pero esto es algo que arreglan en el futuro.
Luego está que, aunque el guión está muy
conseguido y bien trabajado, la historia resulta algo simplona y el plan de
Magneto no resulta tan megalómano como debería ser. Bueno, si es megalómano,
pero al final no da esa sensación tanto como debería dar; quizá por la ya
mencionada falta de espectacularidad.
Y es que, en el fondo, con esta
película ocurre como con Superman
(Richard Donner, 1978), la cual, a pesar de ser una gran película, no dejaba de
ser una presentación del personaje para futuras secuelas. Y aquí ocurre lo
mismo, el film es una presentación de los célebres personajes creados por Stan
Lee y Jack Kirby en 1963 para la futura saga que se avecinaba.
Pero, bueno, a pesar de todo
esto, la película es muy buena y una estupenda adaptación de cómic que se
disfruta de principio a fin y que, como ya he dicho, marca las pautas para
futuras adaptaciones de cómic.
Además, vuelvo a recordar que el
que la película sea menos espectacular y ambiciosa fue culpa de la Fox. Ya que aquí
no ocurre como con Superman Returns,
donde Singer contó con total libertad y un presupuesto ilimitado para luego
hacer esa gran cagada que, desde luego, no le llega ni a la suela de los
zapatos a este film.
Sin duda, los X-Men no pudieron debutar mejor en el
cine. Aunque, la cosa se podía mejorar y, desde luego, lo hicieron. Pero de eso
ya hablaré mas adelante.
11 comentarios:
Qué grande yes.
Harvey Keitel se hubiera adaptado al personaje de Lobezno de una manera impresionante en lo físico. Supongo que tenemos en mente la rudeza del elemento en los cómics.
Pero lo que nos hubiéramos perdido...
Gracias, Hiro.
Si, lo que nos hubiéramos perdido. Por eso desde entonces soy mas condescendiente y espero a ver a los actores caracterizados antes de hacer un verdadero juicio.
Como la actriz que han elegido para hacer de Wonder Woman, a la que pienso dar un voto de confianza a pesar de que no me gusta nada su físico
La verdad es que nunca fui seguidor de los X-Men en los cómics, así que valorarla como adaptación se me antoja complicado.
Sin embargo, considerándolo como película independiente del comic, sí que me parece una de las mejores películas de superhéroes que se han rodado hasta ahora.
Buen e interesante análisis.
TRAFFIC-CLUB
OCIO EN POCAS PALABRAS
Jamás se me olvidaran las ganas que tenía de ver esta pelicula el día de su estreno el seis de octubre del año 2000 - casi cinco meses después que en Estados Unidos - sufrí un patatus porque en aquella época estaba empezando a trabajar seriamente por primera vez y el día seis me tocó currar de tarde :(
Eso sí, el día siguiente flipé en el cine, me parecio una pasada, igual me esperaba más épica o que fuera más larga pero aún así me encantó, Pícara, Logan vacilando a Cíclope, el chiste de la licra amarilla, los cameos de Bobby y John...
Alejandro: Gracias.
Y sobre tu opinión de la película, me alegra que te guste tanto a pesar de no ser seguidor de los comics
Yota: Veo que te ocurrió como a mi. Ambos esperábamos una película mas espectacular pero, aún así, disfrutamos mucho con este estupendo film
Cierto que la película se le valora por haber comenzado de forma más formal el género de superhéroes en el 2000, pero cada vez que la veo, la encuentro menos buena (no mala eso sí), por el metraje, ciertos detalles de producción, donde se nota que tenían el dinero algo apretado. Pero pese a todos esos detalles, se salva por los personajes, que si bien Wolverine y Magneto distan de los comics y la popular serie noventera, son los que más me gustaron y llevan el mayor peso en la película.
De las secuelas ni hablar (X2 se salva), donde empezaron a mezclar cosas, pasarse por el suelo la continuidad y abusar del mal de los matones sin nombre, donde espero que con Days Of Future Past arreglen todos esos cóndores. Aunque temo por la elección de Singer y su seguidilla de malas decisiones, desde su compositor de mierda (que recicla temas de Michael Kamen y John Williams) y la casa de VFX que siempre elige.
Saludos.
TRAFFIC-CLUB
El Calabozo Moralmente Incorrecto
Tengo fe en Singer, ya que hizo un trabajo muy bueno en las dos primeras X-Men.
Pero, desde aquella cagada monumental que fue Superman Returns, le tengo también bastante desconfianza.
Es muy buen director pero, como bien dices, suele tomar malas decisiones
Si, admito que tiene talento (lo ha demostrado en los 90s), sin embargo no ha tenido un proyecto que destaque. Una duda, es por alguna razon en particular que el color de las fuentes sea negra en la parte de los comentarios?
Saludos.
Llevo tiempo queriendo solucionarlo. Te recomiendo mejor que veas los comentarios en el apartado "publicar comentario"
Asi es como suelo hacerlo, gracias por la respuesta.
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