24 de enero de 2012

AMANECER DE LOS MUERTOS (2004)


















La presentación al mundo de Zack Snyder.

Antes de consagrarse con la magnífica 300 (2007) y dirigir las excelentes Watchmen (2009) y Sucker Punch (2011) y la lograda Ga´Hoole: La leyenda de los Guardianes (2010), este gran director debutó en el cine remakeando una gran película de zombies, secuela de otra gran película, dando ya muestras de su talento.

Una misteriosa plaga está asolando el mundo, convirtiendo a los muertos en enloquecidos zombies hambrientos de carne humana que atacan a las personas infectándolas con sus mordeduras y convirtiéndolas en otros zombies. En Wisconsin, Ana (Sarah Polley), una joven enfermera que huye de su hogar cuando su marido ha sido infectado y termina uniéndose a un policía (Ving Rhames), un vendedor de Tv (Jake Weber) y un variopinto grupo de personas que se refugian en un centro comercial en donde, a parte de protegerse de los muertos vivientes, también deberán aprender a convivir y buscar una manera de escapar de allí, puesto que nadie va a ir a rescatarlos.




Como ya he dicho, la película es un remake de una gran película de zombies. Se trata de Dawn of the Dead (1978), conocida en España como Zombie, secuela que George A. Romero dirigió de la magnífica La Noche de los Muertos Vivientes (1968) y que nada tiene que envidiar a la original; incluso la supera en algunos aspectos.

No obstante, a pesar de su condición de remake, este film que nos ocupa poco tiene que ver con aquella. A pesar del título, que la mayoría de la trama tiene lugar en un centro comercial y de varios guiños hacia el film de Romero –como los cameos de Ken Foree, Scott H. Reiniger y Tom Savini –, la película de Snyder se aleja bastante de la trama y el estilo de la película de 1978.

Este film fue muy bien recibido.

En lo que a recaudación se refiere, la película, con un presupuesto de 26 millones de dólares, recaudó 59 millones solo en EEUU y 43 millones mas en el resto del mundo, logrando una recaudación de 102 millones de dólares; un éxito en toda regla. A parte de todo esto, gustó mucho a crítica y público, hasta el punto de que para muchos llega a ser, incluso, mejor que la película de Romero.

¿Y que opino yo?

Pues bien. A mi esta película me gusta mucho y me parece una estupenda película de terror y una de las mejores películas de zombies que se han hecho en los últimos tiempos. No obstante, aún así no me parece mejor que la película de Romero; la cual es muy difícil de superar, incluso para un genio como Snyder.


Además, me resulta muy difícil comparar una película con otro porque, como ya he dicho, ambas películas son muy diferentes la una de la otra. Ocurre como con Piraña 3D (Alexandre Aja, 2010), la cual tampoco quise hacer muchas comparaciones con la película original, Piraña (Joe Dante, 1978), porque ambas eran muy diferentes.

De todas maneras, como ya he dicho, este film me parece inferior a la cinta original. Pero eso no quiere decir que no sea una buena película.




Como siempre, la dirección de Snyder es magistral. El tipo dirige con una maestría impresionante tanto las escenas de acción y los momentos de tensión como a los actores –que, salvo algunas excepciones, hacen un trabajo estupendo –y los momentos dramáticos. El comienzo de la película es impresionante y, a lo largo del film, el ritmo nunca decae y la historia no se estanca en ningún momento –bueno, un poco en los momentos en los que vemos a los personajes haciendo vida en el centro comercial –, logrando mantener el interés hasta llegar a un final que, aunque previsible, resulta muy bueno. Además, la película no acaba ahí, ya que en los créditos finales Snyder nos cuenta, a modo de mockumentary, el (fatal) destino de los protagonistas de una forma genial.

El guión, obra de James Gunn, no es ninguna maravilla, pero es eficaz y tiene momentos verdaderamente impactantes, como lo del bebé zombie, la escena de la motosierra durante la espectacular huida en los autobuses fortificados o la escena de los créditos finales en los que encuentran una cabeza zombie en una nevera.

La película tiene la peculiaridad de que, en esta ocasión, los zombies no son seres lentos y torpes, sino rápidos y ágiles, lo que les hace mucho mas peligroso. No hay duda de que se inspiraron en la, también estupenda, 28 Días Después (Danny Boyle, 2002), que se estrenó dos años antes. Esto creó bastante controversia en su día, ya que muchos aseguraban que eso sería imposible debido al rigor mortis.

De todas maneras, a mi me parece un cambio muy bueno y pega mas con el estilo de Snyder.




Resumiendo.

Una película muy buena. Un estupendo film de terror y de zombies que se disfruta de principio a fin. Como remake, es inferior a la cinta original, pero a mi me parece un remake de lo mas digno.

Desde luego, Zack Snyder no pudo debutar mejor en el cine, ya dando muestras del gran director que es y del talento que luego demostraría en sus siguientes películas.








15 de enero de 2012

UNDERWORLD: LA REBELIÓN DE LOS LICÁNTROPOS (2009)















La tercera entrega de la saga Underworld es una precuela de la historia que relata los sucesos que provocaron la guerra entre vampiros y licántropos; eje central de esta saga.

La historia retrocede mas de mil años antes de los acontecimientos de las dos primeras películas y se sitúa en las salvajes tierras del oeste de Hungría. Los descendientes de los hijos del inmortal Alexander Corvinus han tomado caminos muy distintos. Los vampiros, descendientes de Markus, han crecido como aristócratas elegantes que habitan opulentos castillos, mientras que los hombres lobo, descendientes de William, ha crecido completamente salvajes, incapaces de recuperar su forma humana, y habitan los bosques. Viktor (Bill Nighy), líder de los vampiros, gobierna el lugar con puño de hierro, ejerciendo un gran poder sobre los humanos, a los que obliga a pagar altos tributos a cambio de proteger sus tierras de los hombres lobo.

Al mismo tiempo, en su castillo tiene toda una legión de hombres lobo esclavos. Estos hombres lobo, a los que llama licántropos, son una nueva estirpe, mas civilizada y capaz de cambiar de forma a voluntad. Todos ellos surgieron de Lucian (Michael Sheen), quién nació en las mazmorras de una mujer lobo capturada y que Viktor, al ver sus cualidades, conservó con vida para crear mas licántropos mediante sus mordeduras y así tener esclavos que, además de encargarse de los trabajos mas duros, protegiesen el castillo durante el día. Pero la cosa se complica cuando Sonja (Rhona Mitra), la hija de Viktor, se enamora de Lucian y ambos inician una relación en secreto que, sin saberlo, se convertirá en el motor para que los licántropos se revelen y de comienzo una guerra entre vampiros y hombres lobo que durará hasta nuestros días.



La película se estrenó en EEUU el 23 de enero de 2009 y a España no llegó hasta el 13 de marzo de ese año. Con un presupuesto de 35 millones de dólares, recaudó 46 millones en EEUU y 45 millones en el resto del mundo, haciendo un total de 91 millones de dólares. No hizo una mala taquilla, pero sus resultados fueron inferiores a los de sus predecesoras, que hicieron 95 millones y 111 millones, respectivamente.

El film tiene varios cambios. Para empezar, no dirige Len Wiseman, director de las dos primeras que aquí se limitó a la producción y al guión, siendo sustituido por Patrick Tatopoulos, diseñador de producción y experto en efectos especiales cuya experiencia como director se limita al cortometraje Bird of Passage (2000). Luego está que Kate Beckinsale, protagonista principal de la saga, no regresó aquí, puesto que los hechos de la película son anteriores al nacimiento de su personaje, siendo reemplazada por Rhona Mitra, quién da vida a Sonja, la hija de Viktor, a la que pudo verse en un flashback de la primera entrega interpretada por la modelo Jázmin Dammak. Todo esto sin mencionar que, esta vez, la historia tiene lugar enteramente en la época antigua y no en la actualidad.

Como ya sabéis los que me leéis y conocéis, soy fan de esta saga. La primera entrega, Underworld (2003), me gusta mucho y la segunda entrega, Underworld: Evolution (2006), me gusta mucho mas. Por eso, cuando esta película llegó la esperaba como agua de mayo y, al verla, mis sentimientos están algo encontrados. Por un lado me parece una buena película. Pero, por el otro, la encuentro muy inferior a sus predecesoras y me deja con la sensación de que se podría haber hecho mejor.





Veamos.

La película nos es mala, ni mucho menos. Cumple bien sus funciones y se deja ver. Técnica y visualmente está muy lograda, el guión es simplón, pero cumple, y las interpretaciones, salvo algunas excepciones, están a la altura.

Patrick Tatopoulos dirigiendo no lo hace mal del todo. Se nota que conoce bien la saga –puesto que trabajó en las anteriores entregas –y que ha aprendido de los muchos directores con los que ha trabajado. No obstante, tiene el mismo problema que suele haber cuando un experto en algo se mete a director: que algunos campos están mas trabajados que otros.

Eso es lo que ocurre aquí, donde cosas como el diseño de producción y los efectos especiales están logradísimos y, en cambio, otros aspectos como las escenas de acción, la fotografía o la dirección de actores, aunque logrados, no están tan a la altura.

En cuanto a Rhona Mitra, a parte de muy bella, tampoco lo hace mal y, además, se desenvuelve bien en las escenas de acción. Sin embargo, no logra ni por un momento hacer olvidar a la gran Kate Beckinsale, cuya ausencia se nota en toda la película. Afortunadamente, lo compensa el regreso de Michael Sheen –esta vez, con mas protagonismo que en la primera –, cuya interpretación es de nuevo excelente.


 
Resumiendo.

Un buen film, que se deja ver y se disfruta sin problemas, pero muy alejado de las primeras películas; sobretodo, de la segunda.


Sin duda, el capítulo mas flojo de la saga.






27 de diciembre de 2011

BATMAN VUELVE (1992)















Después del enorme éxito de Batman (1989) su secuela no se hizo esperar. Tim Burton volvió a encargarse de la dirección y Michael Keaton volvió a encarnar al héroe encapotado; ambos por segunda y última vez.

Esta fue la primera película de Batman que vi en el cine. La primera, que se estrenó cuando yo tenía 9 años, no pude ir a verla al cine -bueno, mas bien no me dejaron -en su día, pero esta si pude verla en la gran pantalla. Cuando se estrenó yo ya tenía 12 años y, además, nos ese mismo año nos habíamos mudado y el cine quedaba ya muy cerca de casa.


Desde luego, flipé mucho viéndola. Aunque, como le ocurre a su predecesora, también ha envejecido bastante mal.

En plenas navidades, Gotham City sufre una oleada de delincuencia por parte de una banda criminal compuesta por antiguos trabajadores de un circo y a la que solo Batman (Michael Keaton) puede hacer frente. El líder de esta banda es un tipo al que llaman El Pingüino (Danny DeVito), un ser deforme que fue arrojado al río por sus padres al poco de nacer y ahora pretende vengarse secuestrando a todos los primogénitos de la ciudad para sacrificarlos. Para ello secuestra a Max Shreck (Christopher Walken), un empresario sin escrúpulos al que obliga a asociarse con él bajo la amenaza de desvelar sus negocios sucios. Por su parte, Shreck ve en esto una buena oportunidad para hacerse con el control de la ciudad sacando a la luz al Pingüino presentándolo como una víctima de la sociedad para que la gente lo admire y así convertirlo en candidato a la alcaldía de la ciudad.

Todo el mundo confía en El Pingüino salvo Batman, quién empieza a investigar sobre él descubriendo su relación con la banda criminal y con un circo donde se produjeron desapariciones de niños. Mientras tanto, surge una misteriosa ladrona, una mujer vestida como una gata que se hace llamar Catwoman, mostrando una gran habilidad para el combate y las acrobacia. Esta es, en realidad, Selina Kyle (Michelle Pfeiffer), la ayudante de Shreck. Este la asesinó arrojándola por una ventana cuando vio que esta había descubierto sus verdaderos planes, sin embargo, regresó a la vida ayudada por unos gatos que lograron transferirle parte de sus habilidades; incluidas las siete vidas –nueve para los americanos –.



Al principio, Tim Burton no estaba muy por la labor de volver a dirigir una secuela de Batman después de los problemas que tuvo con el estudio en la primera película. Así que regresó bajo una serie de condiciones. Una de ellas era que la película debía esperar. La Warner quería comenzar con ella a mediados de 1990, pero Burton antes quería dirigir la película Eduardo Manostijeras (1991). También se le díó un mayor control sobre el proyecto, convirtiéndole también en productor, relegando a Jon Peters y Peter Guber, productores de la anterior entrega, a la producción ejecutiva.


Otra de las decisiones de Burton fue contratar a Daniel Waters para reescribir el guión que Sam Hamm había escrito y reemplazar al diseñador de producción Anton Furst –quién ganó un oscar por el diseño de producción de la primera película –por Bo Welch, con quién ya trabajó en Bitelchús (1988) y la mencionada Eduardo Manostijeras.

El éxito de la película fue muy inferior al de la primera. Aún así, con un presupuesto de 80 millones de dólares, la película recaudó 162 millones solo en EEUU y 104 millones en el resto del mundo, haciendo un total de 266 millones de dólares. Sobre los resultados no-económicos de la película, las opiniones son muy dispares. Para algunos es una gran película, superior a la anterior entrega, mientras que otros, a parte de considerarla inferior a la primera, la encuentran demasiado oscura.

Para mi el film está muy a la altura de la primera y llega a superar a esta en algunos aspectos. En esta ocasión, la puesta en escena es mas eficaz y las escenas de acción están mejor rodadas. El guión sigue sin ser una maravilla, pero está algo mas trabajado y mejor estructurado.



No obstante, el film tiene en contra su diseño de producción, el cual está logrado, pero llega a resultar demasiado oscuro y tenebrista, mas propio de una película de terror que de una adaptación de cómic; Batman es un superheroe oscuro y tenebroso, pero aquí la estética de la película no cuadra mucho con él. Me gusta el diseño del Batskiboat y que mantengan el diseño del Batmóvil de la primera, pero el nuevo diseño del traje de Batman no me termina de convenver. La dirección de Burton sigue siendo eficaz, pero hay momentos en los que el tipo parece que se olvida que está en una película de superheroes y, esta vez, su estilo gótico resulta un tanto mas cargante que en la primera.

En cuanto al reparto, aquí la película está tan acertada como su predecesora. Michael Keaton vuelve a hacer un estupendo trabajo dando vida a Batman y los actores que repiten lo hacen tan bien como en el primer film. Michael Gough vuelve a estar genial como Alfred y Pat Hingle vuelve a hacer una buen trabajo como Comisario Gordon; aunque el personaje vuelve a ser tan anodino como en el primer film.


Por otra parte, Danny DeVito está genial y su Pingüino llega a dar bastante miedo, a diferencia del Joker (Jack Nicholson) de la primera. No obstante, no me hace mucha gracia que lo conviertan en una especie de mutante, cuando en los cómics es solo deforme. Aunque, lo mas chocante, es que vivan pingüinos en las cloacas de Gotham; todavía intento encontrarle alguna explicación a eso.

Christopher Walken hace también un trabajo estupendo dando vida a Max Shreck, un personaje que no aparece en los cómics y cuyo nombre es un guiño a Max Schreck, el famoso –y misterioso –protagonista de Nosferatu (F. W. Murnau, 1922), gran clásico del expresionismo alemán. Originalmente, este personaje iba a ser Harvey Dent –interpretado en la primera por Billy Dee Williams, quién no repitió aquí –y al final de la película no iba a morir, sino quedar desfigurado, dando paso a Dos Caras en la tercera. Esto se desechó y el personaje fue reconvertido en el que se ve en la película. También estaba previsto que al final se descubriera que él y El Pingüino eran hermanos, pero esto también fue desechado.



No obstante, quién mas destaca en el film es, sin duda, Michelle Pfeiffer, quién está realmente impresionante como Catwoman; con una estupenda interpretación y dotando al personaje de una sensualidad difícil de superar. Halle Berry ya puede lucir todo el palmito pueda y enseñar tanta carne como le de la gana, porque su Catwoman no le llega ni a la mitad de la suela del zapato a esta Catwoman que tanto hizo suspirar y hacer correr sudores fríos en su día. Desde luego, Anne Hathaway lo va a tener muy difícil para superar el listón; claro, que ella tiene la ventaja de venir de la mano de Christopher Nolan. A ver que pasa.

Resumiendo.

Una buena película y una muy buena secuela, muy a la altura de su predecesora. A gustos personales, yo prefiero mas la primera, pero este film no le desmerece nada. Desde luego, lo de segundas partes nunca fueron buenas, no puede aplicarse a este film totalmente disfrutable de principio.


Como adaptación, sigue la misma linea que la anterior; que se le va a hacer.





29 de noviembre de 2011

LA COSA (2011)
















Bueno, he tardado pero ya he visto esta precuela de la gran película de John Carpenter de 1982 que transcurre en el campamento noruego donde fue descubierta la cosa y la nave donde llegó a la Tierra. El film cuenta los acontecimientos sucedidos allí, los cuales preceden a los del film de Carpenter.

La Antártida, 1982. Unos investigadores pertenecientes a una expedición noruega descubren una enorme nave extraterrestre que lleva miles de años sepultada en la nieve y a una extraña criatura congelada no muy lejos de ella. Kate Lloyd (Mary Elizabeth Winstead), una joven paleontóloga americana, es enviada al campamento de la expedición para investigar a esa criatura. Pero, una vez allí, la criatura resulta seguir viva y logra escapar del bloque de hielo donde estaba atrapada. Pero eso no es lo peor, ya que Kate descubre que esa cosa puede transmutarse en cualquier ser vivo que toca y podría haber suplantado a uno o varios miembros del equipo, lo que hace que la desconfianza entre ellos crezca mientras tratan de impedir que la cosa escape del campamento y se propague por el mundo.

La película se estrenó en EEUU el pasado 14 de octubre –en España lo hizo el 21 de octubre – y, la verdad, no le está yendo muy bien, que digamos. Con un presupuesto de 38 millones de dólares solo lleva recaudados 16 millones en EEUU y 2 millones en el resto del mundo, por lo que su recaudación global es de 18 millones de dólares; un fracaso en toda regla. Eso sin mencionar lo mal que ha sido recibida por la crítica; aunque, leyendo la mayoría de las críticas, tengo la impresión de que los críticos están mas interesados en compararla con el film original que en valorarla como es debido.



La verdad es que no me sorprende este fracaso, ya que se trata de una película bastante innecesaria, ya que cuenta una historia que los fans del film de Carpenter nos montamos en la cabeza hace tiempo viendo la original y, seguro, cada uno tiene en mente su propia versión, digo yo. Eso si, esto no significa que la película se merezca este fracaso.

A mi, desde luego, me ha gustado mucho.

Está muy lejos de estar a la altura del film de Carpenter, eso creo que no hace falta que lo diga, pero eso no significa que sea mala. Yo adoro la película de 1982, un film excelente y todo un clásico del cine de terror y ciencia ficción; para mi, incluso, supera a la película que remaquea, El Enigma de Otro Mundo (Christian Nyby, 1951). Sin embargo, yo no llego al nivel de fanatismo del que hacen gala muchos fans que ya juzgaron y crucificaron esta película desde el mismo día que se anunció el comienzo de su producción y que, aunque les haya llegado a gustar, seguirán diciendo que es una mierda creyendo que si dicen lo contrario están traicionando al film original.

Yo ya he dicho muchas veces que no soy así y si la película me ha gustado no tengo por qué decir que no lo ha hecho solo por quedar bien con una panda de amargados que malviven creyendo que su film adorado va a caer en el olvido ante las nuevas generaciones cuando lo importante es que se mantenga vivo dentro de su cabeza.

Pero, bueno, dejemos ya estas cosas y vamos a lo que importa. Comenzaré, como siempre, por lo bueno.



Para empezar, la película está muy bien dirigida, con una buena forma de llevar el ritmo y de crear momentos de tensión. Su director, el holandés Matthijs van Heijningen Jr., un tipo practicamente desconocido surgido de la publicidad, hace un muy buen trabajo en el que es  su primer film. Sin duda, no llega a la maestría de Carpenter, pero demuestra ser un buen director, logrando sacar este film adelante en todo momento. Además, no solo no intenta superar la película de Carpenter, sino que también se la toma muy en serio y se muestra muy respetuoso con ella.

La película está rodada de una forma que recuerda el estilo del cine de los 80 y, sobre todo, al de la película original. Además de que el diseño de producción está muy logrado y recrea con bastante fidelidad lo visto en la película que precede. En serio. El campamento noruego que vimos destruido en el anterior film aquí podemos verlo a pleno rendimiento muy bien recreado.

Otro punto muy a favor del film es su reparto. Todos los actores, sin excepción, hacen un trabajo muy bueno y la dirección de actores es genial. Desde luego, a nivel interpretativo, la película aprueba con nota; y en una película con tan pocos personajes, estas cosas se aprecian muy bien.


No obstante, el film falla en algunas cosas.

El guión no es malo del todo, pero es bastante simplón. También, aunque la película ata muy bien los cabos para que el final coincida con el principio de la película de Carpenter, hay un fallo bastante grande y que resulta algo inaudito.











Lo que viene a continuación contiene SPOILERs,  así que quién no haya visto la película aún que se abstenga de leerlo o lo haga bajo su total responsabilidad.







Hablo de la nave extraterrestre. En la película de 1982 veíamos en unas grabaciones –que, en realidad, era material de archivo de la versión de 1951 –como los noruegos colocaban cargas explosivas para dejar la nave al descubierto. Sin embargo, aquí vemos al final que la razón de que la nave se quite la nieve de encima es que la cosa, intentando escapar en ella haciéndola despegar hasta que es detenida por la protagonista.

Resulta bastante chocante que con lo que cuidan otros detalles –lo del perro perseguido por los noruegos en el helicóptero o el tipo que se abre las venas y la sangre congelada le cuelga de las muñecas –aquí cometan un fallo tan gordo. Mi única explicación es que lo hicieran a propósito, tomándose esa licencia porque de la otra forma queda mas espectacular. No sé.

La película está llena de guiños a la original, pero hay algunas escenas que ya son copia descarada. Como esa en la que, después de que los pilotos americanos (Joel Edgerton y Adewale Akinnuoye-Agbaje) se escapan de donde les han encerrado y tratan de entrar donde están los otros personajes y estos les oyen romper un cristal y corren hacia ellos para descubrir que estos se han hecho con armas y se hacen con el control de la situación; igual que MacReady (Kurt Russell) en la cinta de Carpenter. Con cosas como estas no es de extrañar que algunos la acusen de ser mas un remake que una secuela.







Fin de los SPOILERS.









Aunque, donde mas falla el film es en los efectos especiales. Mientras algunos efectos son muy buenos y están muy logrados, otros, en cambio, resultan algo cutres y bastante cantososos.

Un buen ejemplo está en la escena del helicóptero, cuando el tipo del bigote se descubre como la cosa. Al principio, se le parte la cabeza; un momento realmente genial, muy en la linea de la película de Carpenter. Pero luego se le abre el cuerpo en forma dentada sacando miles de tentáculos bastante mal hechos y que cantan una barbaridad, haciendo que ese efecto contraste mucho con la de la cabeza, quitándole así impacto a la escena.



Otros ejemplos son la cosa con las dos cabezas fusionadas que vimos quemada en la anterior película –y que aquí vemos como se forma –, la cual está muy lograda y su diseño es muy bueno, o la noruega –el otro personaje femenino del film –convertida en cosa, que es realmente genial. Por el contrario, cuando parten el brazo-cosa (así es como lo llamo yo) con un hacha y esta vuelve a juntarse, ahí los efectos son realmente malísimos.

Y así toda la película. Hay momentos en que los efectos están muy logrados y bien hechos, pero en otros son de un cutre impresionante; como si se hubieran currado mucho mas unos efectos que otros o que el equipo de efectos especiales estuviera formado por vagos y competentes por igual.

Luego tenemos el climax en el interior de la nave, donde se produce el enfrentamiento final con la cosa.

El interior de la nave alienígena –algo que quedó pendiente de la película de 1982 –me gustó mucho y está realmente logrado. Un escenario perfecto para un final espectacular. No obstante, el climax se queda a medias. El enfrentamiento final con la cosa no está mal del todo, pero deja bastante sensación de frialdad. Por un lado, el diseño de la cosa a la que se enfrenta la chica es realmente lamentable. Encima, el rostro humano que le ponen está hecho de forma penosa; deberían haber utilizado motion capture para hacerlo, pero se ve que no –es un efecto mas propio de una película de los años 90 que de un film de 2011 –. Luego, la situación se resuelve demasiado rápido OJO SPOILER con la protagonista volando a la cosa con una simple granada FIN DEL SPOILER.




Claro, que ahora que lo pienso, este fallo también se lo podemos achacar a la película de Carpenter. Porque una de la pocas cosas que me rechinan de ese film es el enfrentamiento final, que no estaba a la altura del conjunto de la película y, al igual que pasa aquí, el diseño de la cosa no me convenció del todo y la situación se resolvía de una forma muy similar. Claro, que eso no exculpa a esta película, ya que podían habernos ofrecido un final mucho mas espectacular.

Resumiendo.

Una buena película que no llega, ni intenta llegar, a la maestría de la gran obra de John Carpenter. Pese a los fallos que tiene, el conjunto es bastante bueno y la película se disfruta de principio a fin. Como precuela, la película funciona muy bien. Pese al fallo que he dicho antes en el spoiler, ata muy bien los cabos para enlazar su trama con la del film original, al que respeta en todo momento –salvo algunas escenas copiadas descaradamente, como ya he dicho antes –y se la toma muy en serio.

Como ya he dicho al principio, es una película que no había mucha necesidad de hacerla. Pero, ya que la han hecho, es agradable de que nos hayan ofrecido un buen film que no abochorna a los fans del film de 1982; al menos, a mi no me ha abochornado.

Después de ver a Mary Elizabeth Winstead en este film y como se desenvuelve en las escenas de acción, cada vez tengo mas claro que la desaprovecharon mucho como action women en La Jungla 4.0.