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18 de julio de 2012

THE DARK KNIGHT (2008)












Al poco de estrenarse Batman Begins (2005) se puso inmediatamente en marcha su secuela donde, ateniéndonos a la escena final de la película, sabíamos que el villano principal iba a ser el famoso archienemigo del hombre murciélago: El Joker.

Tal y como dije cuando analicé Batman Begins, fue un acierto el enfrentar al héroe contra villanos poco conocidos por el gran público, ya que se trataba de una película que habla sobre los orígenes de Batman y el film se centraba en él, por lo que haber metido un villano importante, como el Joker, Dos Caras, Enigma, El Pingüino –tan solo El Espantapájaros era mas conocido por el gran público –, que pudiera hacerle sombra hubiera sido un gran error.

No obstante, ahora el personaje ya estaba totalmente presentado, momento ideal para que apareciera en escena el que ha sido siempre su principal adverio.

Un año después de que Batman (Christian Bale) hiciera su aparición en Gotham City, las cosas han ido mejorando. Aunque la mafia sigue en activo bajo el liderazgo de Salvatore Maroni (Eric Roberts), sucesor de Carmine Falcone, la delincuencia y la corrupción ya no dominan la ciudad, puesto que los delincuentes de las calles temen encontrarse con el hombre murciélago, cuya presencia el teniente Gordon (Gary Oldman) se encarga de recordarles encendiendo cada noche la bat-señal; incluso los líderes mafiosos celebran sus reuniones a plena luz del día por miedo a Batman. Además, la cosa mejora aún mas con la llegada del nuevo fiscal del distrito, Harvey Dent (Aaron Eckhart), un idealista que está inspirando a los ciudadanos de Gotham mas, incluso, que el propio Batman, quién ve en Dent la persona ideal en cuyas manos dejará la protección de la ciudad y así poder retirarse, ser solamente Bruce Wayne y, sobre todo, poder estar con Rachel Dawes (Maggie Gyllenhaal); aunque esta es pretendida también por Dent.

Sin embargo, un nuevo peligro llega a la ciudad. Un individuo está provocando el caos, cometiendo atentados, asesinando gente indiscriminadamente y amenazando directamente a Dent y a los altos cargos de la ciudad. Se trata de un tipo sin ninguna identidad conocida y que responde al nombre de El Joker, ya que lleva su desfigurado rostro pintado como un payaso. El Joker pronto se convierte en un reto para Batman, ya que se trata de un enemigo diferente a los que se ha enfrentado hasta ahora, alguien que actúa sin ningún motivo aparente, que no busca dinero ni poder, tan solo ver arder el mundo, como dice Alfred (Michael Caine). Cuando Dent, ayudado por Batman y Gordon, consigue encarcelar a todos los criminales de Gotham relacionados con la mafia y arrestar al hombre que controla el dinero de los mafiosos, Maroni y otros líderes del hampa hacen un trato con El Joker, quién les pide la mitad de su dinero a cambio de matar a Batman. El Joker comienza a asesinar a policías mientras hace un llamamiento público al hombre murciélago diciendo que los asesinatos cesarán si él revela su identidad. Tras un atentado contra el alcalde en donde Gordon, aparentemente, termina muriendo, Bruce decide revelar su identidad. Pero, antes de poder hacerlo, Dent se le adelanta y dice que él es Batman. Su plan es capturar al Joker cuando este intente matarle creyendo que es Batman; plan que funciona. Sin embargo, con el Joker las cosas nunca son lo que parecen y la cosa terminará de forma trágica.

Batman Begins terminaba con una escena en la que Gordon le hablaba a Batman de un tipo buscado por varios delitos, como robo a mano armada y asesinato, al que también le gusta la puesta en escena y firma sus delitos dejando una carta que es siempre la misma: un comodín.

Era una clara pista de por donde iban a ir los tiros en la futura secuela, la cual estaba ya siendo planificada.

David S. Goyer declaró poco después del estreno que tenía una idea para una continuación. Dicha continuación iban a ser dos películas. En la primera de ellas, Batman se aliaba con Gordon y Dent para hacer frente al Joker, el cual no moriría al final –el gran error que cometieron en la película de Tim Burton, no me cansaré de repetirlo –. En la segunda, el Joker era juzgado por sus crímenes y, durante el juicio, Dent quedaba desfigurado y se convertía en Dos Caras, que sería el villano de esa segunda secuela. Una idea bastante buena; aunque sufriría varios cambios en el futuro.

Christopher Nolan, que volvía a hacerse cargo de la dirección y, además, esta vez actuaba también como productor, volvió a contar con la ayuda de Goyer; aunque esta vez solo para el argumento, ya que el guión definitivo lo escribió junto a su hermano, Jonathan Nolan.

Nolan se puso a trabajar en este film una vez terminó su siguiente película, El Truco Final: El Prestigio (2006). El proyecto levantó una gran expectación. Como ya dije cuando la analicé, Batman Begins fue ganando adeptos con el tiempo y su popularidad creció mucho los años siguientes. La gran pregunta era que actor iba a dar vida al Joker, para el que sonaron muchos actores; uno de ellos, el mismísimo Mark Hamill –alias Luke Skywalker –, quién ya le había puesto voz al personaje en la siniestra serie de animación de los años 90.

En el verano de 2006, cuando también se hizo público el título de la película, The Dark Knight –un claro homenaje a The Dark Knight Return (El Regreso del Señor de la Noche), el magistral cómic de Frank Miller –, se anunció que el gran elegido era Heath Ledger, una decisión que sorprendió a todo el mundo; incluyéndome a mi. Ledger era un gran actor, pero no parecía el mas indicado para dar vida al Joker y, sobre todo, costaba imaginarlo como el personaje. Aún así, la confianza depositada en Nolan era mas que suficiente para aceptarlo.

En enero de 2008, unos meses antes del estreno de la película, Ledger falleció repentinamente, algo que conmocionó a todo el mundo; sobre todo, a los fans de Batman, viendo que su interpretación como el Joker iba a ser un trabajo póstumo. Hay rumores de que el actor se suicidó por el fuerte ritmo de trabajo al que le sometió Nolan, pero nunca han sido probados.

La película fue un éxito enorme. Con un presupuesto de 185 millones de dólares, solo en EEUU hizo 533 millones, siendo la película que mas se había acercado a Titanic (James Cameron, 1997), que con 600 millones era la película mas taquillera en la taquilla estadounidense –todavía no se había estrenado Avatar –. A esto hay que añadir 468 millones mas recaudados en el resto del mundo, haciendo un total de 1.001 millones de dólares. Fue la película de superheroes mas taquillera de la historia y la única que había logrado superar los 1.000 millones hasta que Los Vengadores (Joss Whedon, 2012) le ha quitado recientemente el puesto.

La película, además, fue aplaudida por la crítica y elogiada por el público, que llegó a compararla con El Padrino. La interpretación de Ledger como el Joker fue muy aplaudida; aunque también tuvo sus detractores que, como ya ocurrió con Batman Begins, la mayoría de ellos eran fanáticos e incondicionales de las películas de Tim Burton que no paraban de manifestar que Jack Nicholson era mucho mejor Joker y punto en boca. Incluso afirman que en esta película el error fue dejar al Joker vivo, ya que, con la muerte de Ledger, no iba a poder salir en mas películas; una de las mayores gilipolleces que he oído en mi vida.

Ledger llegó a recibir el oscar como actor secundario –a modo póstumo, claro –. Un oscar que, sinceramente, admito que se lo dieron mas como homenaje por su repentina muerte que por su trabajo en el film; aunque, esto no quiere decir que no se lo mereciera.

Muchos dicen que el enorme éxito de la película se debió exclusivamente a la muerte de Ledger. Yo, desde luego, admito que esto pudo influenciar de cara a la taquilla. Sin embargo, hace falta mucho mas para lograr un éxito de esas magnitudes; ahí está Los Vengadores haciendo cifras astronómicas con todos sus protagonistas vivitos y coleando. Además, seguro que la siguiente entrega, The Dark Knight Rises, también logra resultados similares sin que tenga que morir ningún miembro del reparto.

Lo que ocurre es que Batman Begins, aunque no hizo una taquilla tan enorme como esta, sentó bien las bases para la creación de la saga, despejó todas las dudas sobre la capacidad de Nolan para llevar al cine al hombre murciélago y, como ya he dicho antes, fue ganando admiradores posteriormente que hicieron que la expectación en torno a este film aumentaran de manera desorbitada. Estos admiradores no se sintieron nada defraudados cuando la vieron; por lo que el boca a boca funcionó de maravilla.




ASÍ ES COMO LA PELÍCULA HIZO SEMEJANTE ÉXITO




En cuanto a mi, como bien sabéis, Batman Begins me encantó y esta secuela la esperaba con muchas ansias y con las expectativas muy altas esta vez. Tenía unas ganas locas de ver a este nuevo Batman otra vez en acción, esta vez, enfrentándose a su peor enemigo; del cual tenía mucha curiosidad de ver cual era la visión que Nolan había hecho sobre este personaje a pesar de las dudas que tenía con respecto al actor.

Y, desde luego, Nolan no me decepcionó. La película está en la misma línea que la primera; lo que quiere decir que nos encontramos ante...



...OTRA OBRA MAESTRA.



Nolan vuelve a dirigir de una manera impecable, con un ritmo que nunca decae, una dirección de actores sobresaliente y un muy buen equilibrio entre cine de calidad y cine espectáculo. Las escenas de acción están muy logradas, lo mismo que los efectos especiales; la impresionante secuencia del helicóptero es una buena muestra de ello. El diseño de producción también está muy logrado, aunque aquí el estilo realista de Nolan se impone mucho mas que en la primera, hasta el punto de que si quitaramos a Batman, al Joker y a Dos Caras nos quedaría una película policiaca normal y corriente.

Desde luego, visualmente la película no es muy fiel a los cómics. Sin embargo, como ya dije con Batman Begins, una cosa es la estética y otra cosa es la esencia de los cómics, a la que la película se mantiene muy fiel en su guión; de nuevo un guión brillante que vuelve a ser el punto mas fuerte del film.

De nuevo nos muestran a un Batman excelente, interpretado de forma magistral por Christian Bale, quién vuelve a demostrar que él es el Batman definitivo. El nuevo traje que le ponen, mucho mas moderno, no está mal; aunque, personalmente, yo prefiero mas el primer traje. Además, aquí utiliza nuevos gatches y podemos ver un nuevo vehículo, el Batpod, una especie de motocicleta que surge de la parte frontal del Batmóvil, que es genial.

No obstante, en esta ocasión, Batman pasa un poco a segundo plano para dejar paso a la verdadera estrella de la película, ese Joker magistralmente interpretado por Heath Ledger que es, sin duda, uno de los mejores villanos del cine reciente; incluso de la historia del cine me atrevería a decir.

En su día no quise hacer comparaciones entre este Joker y el interpretado por Jack Nicholson en 1989 porque ambos Jokers son muy diferentes. Sin embargo, sobre cual de estos Jokers es mejor, no tengo ninguna duda.

El Joker de Nicholson era visualmente muy parecido al de los cómics, casi idéntico. Sin embargo, como ya dije cuando analicé el Batman de Tim Burton, a este Joker le faltaba un detalle muy importante: DAR MIEDO.

Un detalle que a este nuevo Joker le sobra por todos lados, ya que acojona desde el primer momento en que sale. Es un completo desquiciado que quiere provocar el caos y la anarquía solo para darse el gusto de ver arder el mundo; además de que es un sádico y un asesino implacable que disfruta mucho matando a sus víctimas; yo diría que hasta se excita y todo. Puede que su aspecto difiera mucho de los cómics y que se pinte la cara de payaso en lugar de haberse quedado así por entrar en contacto con productos químicos. Pero, sin embargo, su personalidad es, practicamente, la misma que la de su homólogo en las viñetas. Se ve que este Joker está claramente inspirado en el de los primeros cómics, donde el personaje era un asesino de masas que asesinaba a las personas por docenas.

Así están lascosas. El Joker de Nicholson a penas me asustó, ni tan siquiera cuando lo vi por primera vez con 11 o 12 años. En cambio, este Joker me metió el miedo en el cuerpo desde el primer momento a pesar de que tenía 28 años cuando lo vi por primera vez.

Claro, que no es solo miedo lo que provoca este Joker. También desprende un humor negro que llega hasta lo macabro. Recuerdo la escena del lápiz, la cual, a pesar de mi miedo, me hizo soltar unas carcajadas tan fuertes que varias personas en el cine se volvieron para mirarme. Y no fue la única vez.

Otra cosa que me gusta de este Joker es que no se le da ningún origen conocido ni ninguna pista sobre su pasado o sobre cuales son sus motivaciones. Esto me gusta por dos razones: 1) es mas fiel a los cómics, donde el personaje no tiene ningún origen conocido a pesar de que algunos cómics, como La Broma Asesina de Alan Moore, se lo dan y 2) porque esto le hace ser el peor adversario de Batman, ya que es un villano al que le cuesta comprender a un héroe que, durante años, trató de entender a los criminales. Encima, le hace sacar lo peor de él.

Aunque, el mejor acierto de Nolan es no matarlo al final de la película; a diferencia de lo que hizo Burton. Ver como el Joker se desploma al vacío y Batman le salva la vida arrojándole un gancho aún sabiendo el peligro que supone dejar con vida a alguien así me encanta, porque eso es, precisamente, lo que hace Batman en los cómics. Decir que esta escena está forzada o que es innecesaria porque el Joker no va salir en la tercera es una completa gilipollez.

No obstante, no es solo el Joker el único villano del film. También tenemos a Dos Caras.

Aaron Eckhart hace un gran trabajo en su doble papel: el idealista Harvey Dent primero y el desquiciado Dos Caras después.

Desde luego, este Dos Caras es excelente. Nada que ver con el que vimos en Batman Forever (Joel Schumacher, 1995), donde desperdiciaron a un gran actor como Tommy Lee Jones haciéndole comportarse como un retrasado mental todo el tiempo. Nada de eso se ve en este film.

A parte de estar muy bien hecho, el personaje es el mismo de los cómics; y no me refiero solo al aspecto. Lo que mas difiere del cómics es cuando se desfigura, lo cual se hizo quemándole con gasolina en lugar de con ácido. Aunque, debo decir que así queda mas creíble. Además, no solo su rostro se quema, también la mitad de su traje, haciendo que el personaje tenga un traje con dos mitades diferentes. Una gran sorpresa para mi, ya que creía que lo del traje no pegaría con el estilo realista de Nolan; una vez mas, me alegro de haberme equivocado.

Desde luego, este Dos Caras es impresionante, el mismo Dos Caras que el de los cómics, como ya he dicho antes. Lo único que lamento es que no salga mas en pantalla. Todavía no entiendo por qué Nolan no siguió con la idea de Goyer de sacar solo a Harvey Dent y dejar a Dos Caras para la tercera entrega; claro, que si Nolan ya tenía pensado hacer solo una trilogía y quería sacar nuevos villanos en la tercera, se entiende.

Eso si, lo que no me gusta es que, al final, Nolan cometa el mismo error que Tim Burton con el Joker y mate al personaje. Vale que esto es algo necesario para el gran sacrificio que hace Batman al final; pero, aún así, no lo encuentro bien.

No obstante, la verdad es que nunca se da al personaje totalmente por muerto. La caída que sufre el personaje es mucho menor que la que sufría el Joker en el film de Burton y hay gente en la vida real que ha sobrevivido a caídas como esa.

Yo tengo una hipótesis. Que Dos Caras no muere y queda en coma y, para que no se descubra la verdad, Gordon –con la ayuda de Batman, si es posible –lo esconde y hace creer que ha muerto. Esto sería un buen punto de partida para recuperar al personaje en una futura entrega en la que despierta inesperadamente del coma y vuelve a la acción.

Desgraciadamente, Nolan dejó claro que el personaje no iba a salir en la tercera entrega y, dado que esa será ya la última de la saga, dudo mucho que veamos de nuevo a este Dos Caras.

De todas formas, yo prefiero pensar que este Dos Caras no está muerto y que se encuentra en coma en algún hospital bajo una identidad falsa en lugar de pensar que murió. Con el Joker de Tim Burton esto no es posible, porque desde esa caída era imposible sobrevivir; y no me vale la excusa de que las películas de Burton son menos realistas y mas fantásticas, porque resucitar al Joker en la anterior saga no resultaría creíble a menos que la historia se desarrollara en Matrix o en el mundo imaginario de Baby Doll.

Por lo demás, Gary Oldman vuelve a estar magistral como Gordon, a quién vemos como ascienden a comisario. Michael Caine vuelve a ser un excelente Alfred. Y Morgan Freeman vuelve a estar genial como Lucius Fox.

La chica del film si cumple esta vez. Maggie Gyllenhaal es una excelente actriz –para mi es, incluso, mejor interprete que su hermano –y su trabajo interpretativo está a la altura del resto del reparto. El único problema es que interpreta a Rachel Dawes, a quién ya vimos en la primera interpretada por Katie Holmes que, aunque no hizo un trabajo tan bueno como el de ella, ya me había acostumbrado a ponerle al personaje el rostro de Holmes. Creo que hubiera sido mejor que Gyllenhaal hubiera interpretado otro personaje; a ser posible, alguien de los cómics, como Vikky Vale o Julie Madison.

The Dark Knight es una película excelente y, como su predecesora, una gran adaptación de Batman. Sobre cual de las dos entregas es mejor, yo no lo tengo tan claro como el resto del mundo, donde algunos dicen que esta es mejor que Batman Begins y otros que dicen que Batman Begins es mejor. A mi, en cambio, me cuesta decidir, porque ambas películas son maravillosas y están completamente a la altura la una de la otra.

Claro, que en esta hay cosas que hecho de menos, como la Mansión Wayne y la Batcueva –porque ese subsótano iluminado no termina de convencerme –; aunque estas ausencias están justificadas, ya que solo ha pasado un año y la mansión aún no está reparada del todo y Batman no va a utilizar la Batcueva mientras duren las obras. Aunque estas no son las únicas ausencias. También está la Torre Wayne de la primera –que me encanta –o esos trenes monorrail que tanto juego dieron en el anterior film.

Todo esto haría que me inclinara mas por Batman Begins. Pero, como ya he dicho, para mi ambas películas son dos obras maestras y ambas son las mejores películas de sus respectivos años (2005 y 2008) y me cuesta decidirme entre ambas.

Ahora, dentro de unos días, podremos ver el final de esta trilogía con la prometedora The Dark Knight Rises, la cual veré y analizaré en este blog, completando así mis análisis sobre las películas de Batman.





30 de mayo de 2012

MORTADELO Y FILEMÓN. MISIÓN: SALVAR LA TIERRA (2008)








Desgraciadamente, La Gran Aventura de Mortadelo y Filemón (Javier Fesser, 2003) fue un gran éxito de taquilla y eso propició que se realizara una secuela, esta vez con nuevo director y un nuevo Mortadelo.

Lo mas jodido es que tenían la oportunidad de haber arreglado el estropicio de la primera entrega y, aunque es cierto que esta película mejora un poco a su predecesora, dejaron escapar la oportunidad.

La sinopsis la copio directamente de Filmaffinity porque no tengo ganas de entretenerme escribiéndola.

El planeta se enfrenta a una gran amenaza. Coincidiendo con una gran sequía, un grupo de malhechores se propone eliminar las reservas de agua que quedan en la tierra. Los mejores agentes secretos del mundo se reúnen urgentemente, pero no cuentan con ninguna pista. Para empeorar las cosas, el malvado Botijola (Carlos Santos) planea atentar contra esa reunión, para acabar así con todos los agentes. Su intención es convertir la bebida que lleva su nombre en el sustituto del agua. Para ello, intentará también secuestrar al profesor Bacterio (Janfri Topera). Sin embargo, hay dos cosas con las que Botijola no contaba. Por un lado, Bacterio, antes de ser secuestrado, escondió las piezas de su invento en distintos momentos históricos, utilizando la máquina del tiempo. Por otro, hay dos de los agentes internacionales que no han acudido a la reunión saboteada, ellos van a convertirse en la única esperanza del mundo. Mortadelo (Eduard Soto) y Filemón (Pepe Viyuela) tendrán que dejar de lado sus disputas para volver de nuevo a la acción, con la inestimable ayuda de Ofelia (Berta Ojea) y siguiendo los designios del Súper (Mariano Venancio)...

Después de que la primera entrega arrasara en taquilla, se puso inmediatamente en marcha su secuela. Javier Fesser no repitió como director y fue reemplazado por Miguel Bardem, que ya fue candidato para dirigir la primera.

La película tardó unos cuantos años en llegar, ya que Bardem y los guionistas se embarcaron en la escritura de varios guiones hasta que dieron con uno de su agrado. Si la primera adaptaba El Sulfato Atómico, esta adapta, también de forma muy libre, otra historia larga, El Caso del Bacalao; de la cual, por cierto, la primera película cogió algunos detalles, como esa entrada secreta con forma de farola.

La mayoría de los actores de la primera repiten en esta secuela. Mariano Venancio volvía como El Súper, Juanfri Topera volvía como el Profesor Bacterio, Berta Ojea volvía como Ofelia y Emilio Gavira como Rompetechos. Otro que también volvía era Pepe Viyuela como Filemón, pero no Benito Pocino como Mortadelo, quién era reemplazado por Eduard Soto –también conocido como Edu Soto –, actor que saltó a la fama en 2005 gracias al programa Buenafuente, que emitía por aquel entonces Antena 3 –cadena que, por cierto, participó en la producción de este film –, donde, entre otras cosas, interpretó al ya mítico Neng de Castefa.

¿Os acordáis de él?



¡¿QUE PASA NEEEEEEEEEEEENG?!



Volviendo a la película. Esta costó nada menos que 10 millones de euros, cuatro millones mas que la primera. Sin embargo, sus resultados en taquilla dejaron bastante que desear, recaudando solo 7 millones de euros con los que no lograba ni recuperar la inversión.

Un fracaso de toda regla y no es de extrañar. La primera fue un éxito enorme pero, como dije, la gente salió de verla con cara de venir del funeral de su madre. En serio, no vi a nadie riéndose y todo el mundo tenía mucha prisa por abandonar la sala; ni tan siquiera se esperaron a que encendieran las luces. Y esto, seguramente, se repitió en mas cines. Así que, cuando llegó esta secuela, mucha gente pasó de gastarse su dinero en verla esperándose mas de lo mismo; y lo peor es que no se equivocaban.

Como ya dije, la primera película es una PUTA MIERDA. A pesar de que ténicamente estaba muy bien hecha y el diseño de producción reflejaba muy bien el universo de los cómics de Francisco Ibañez, la película se desplomaba por completo con un guión nefasto que no recreaba nada el humor característico de los cómics y, encima, hacía que la película aburriera terriblemente. Además, la interpretaciones eran demasiado histéricas y los personajes eran tratados de una forma nefasta; especialmente Rompetechos.

Como he dicho al principio, esta película me la esperaba peor y, la verdad, debo decir que se hace algo mejor que la primera, ya que no aburre tanto y se hace mas fácil de ver que su predecesora. Pero que nadie se tome una idea equivocada. A pesar de ello, esta película es otra PUTA MIERDA y una adaptación de Mortadelo y Filemón tan nefasta como lo fue la anterior.

Por un lado, los efectos especiales están bien y el diseño de producción vuelve a recrear muy bien el universo de Ibañez. Ahí volvieron a estar muy acertados. Pero todo lo demás es pura porquería.

El guión vuelve a ser una basura. Todo son chistes malos, situaciones ridículas a mas no poder y gilipolleces por cada metro cuadrado. De nuevo casi nada del humor característico de los cómics se ve en el film y la cosa vuelve a derivar en otra comedia tontorrona que tanto gusta al cine español.

El tratamiendo de los personajes vuelve a ser lamentable. De nuevo hiciendo que los actores se comportasen como si fueran gilipollas y se parecieran lo menos posible a sus homólogos del cómic.

Filemón, de nuevo interpretado por Pepe Viyuela, es el mismo de la primera, con la diferencia de que aquí las entradas de la cabeza no son tan visibles; eso si, de los dos pelos que el personaje lleva en la cabeza vuelven a pasar como de comer mierda.

Por su parte, lo de Mortadelo es ya para indignarse aún mas, si cabe.

En la primera escogieron para interpretarle a Benito Pocino, alguien que, físicamente, daba muy bien el pego para el personaje, pero que era un actor muy malo y, encima, la voz que tenía no le hacía ningún favor al personaje.

Aquí, en cambio, escogieron a Edu Soto, que si es un buen actor; sin duda, una decisión de casting bastante acertada. De Soto no tengo ninguna queja. El problema aquí es la caracterización que hacen del personaje, la cual es realmente lamentable; mas que Mortadelo, parece el tonto de algún pueblo o un subnormal con gafas. Para ese plan, mejor que hubieran dejado a Pocino, esta vez con Carlos Latre doblándole la voz por completo. Seguro que hubiera quedado algo mejor que lo que se ve en este film.

Rompetechos ya no es facha, pero sigue tan tocapelotas como en la primera y el resto de los personajes está en la misma linea, tanto los sacados de los cómics como los inventados; porque continúan inventándose personajes mas propios de una película de Torrente que de los cómics de Ibáñez.

En el resparto hay buenos interpretes, muchos de ellos provenientes de la Tv -como Alex O'Dogherty, un pedazo de actor -, pero eso importa poco, ya que la dirección de actores es lamentable; incluso peor que la de la primera –que ya es decir –.

Miguel Bardem es un director pésimo, con una filmografía donde la mierda abunda tanto como el agua en el Océano Pacífico. El tipo no ha heredado ni una pequeña pizca del talento de su padre, el gran Juan Antonia Bardem, y se ha limitado hacer bodrios a lo largo de su carrera. A él le debemos defecaciones como La Mujer mas Fea del Mundo (1999) –la cual solo vi una vez y todavía lo estoy lamentando –, Noche de Reyes (2001) –una comedia donde tan solo te ríes si alguien te hiciera cosquillas durante el visionado –o Incautos (2004) –o intentar hacer Los Ladrones van a la Oficina en serio–.

Es por ello por lo que me esperaba esta película peor que la primera, ya que si un buen director como Javier Fesser fue capaz de hacer una tremenda porquería, ¿que sería capaz de hacer con su secuela el primo de Javier Bardem?

Pues otra puñetera mierda que no le hace nada de justicia a los estupendos cómics de Mortadelo y Filemón, los cuales vuelven a pasarse por el forro de los cojones para ofrecernos otra película casposa y ridícula que tan solo consigue abochornar, tanto a los que hemos crecido leyendo estos cómics como cualquiera con dos dedos de frente y un poco de buen gusto.

Como película, hay que reconocer que se hace menos aburrida, menos pesada y mas fácil de ver que la primera. Pero, aún así, sigue siendo un bodrio tremendo.

Mortadelo y Filemón siguen sin tener la película que se merecen.

Ahora están haciendo una tercera película, Mortadelo y Filemón contra Jimmy el Cachondo. Al principio se dijo que iba a estar de nuevo protagonizada por Pepe Viyuela y Edu Soto y la iba a volver a dirigir Miguel Bardem, pero ahora sabemos que la dirigirá Javier Fesser y será realizada enteramente en animación digital en 3D utilizando la motion capture; será una película tipo Las Aventuras de Tintín: El Secreto del Unicornio (Steven Spielberg, 2011).

Pero, de todas maneras, por muy bien hecha que esté la animación en 3D, dudo mucho que la película funciona a menos que Fesser, antes de escribir el guión, vuelva a leerse los cómics de Ibañez para documentarse y no le de otra vez por basarse en los recuerdos de su infancia, que fue la gran cagada que hizo en la primera.

A ver si, esta vez, podemos contar con una película de Mortadelo y Filemón como dios manda.






25 de abril de 2012

EL INCREIBLE HULK (2008)










El Increíble Hulk es la última de las predecesoras de la esperadísima Los Vengadores que me queda por analizar en este blog antes de que llegue el esperadísimo viernes.

El popularísimo personaje creado por Stan Lee y Jack Kirby en 1962 es uno de los principales protagonistas de la película de Joss Whedon y, según dicen los que ya han podido verla, es la principal estrella de la película. Y, al igual que Iron Man, Thor y el Capitán América, también tuvo película propia antes.

Bueno, en el caso de Hulk tuvo dos. Una primera bastante decepcionante a manos de otro estudio y una segunda en manos de Marvel mucho mas lograda y mas fiel a los cómics. Es esta última la que nos ocupa.

Cinco años antes, el doctor Bruce Banner (Edward Norton) se prestó como como cobaya en sus experimentos con la radiación gamma y terminó convirtiéndose en Hulk, una masa gigantesca de color verde con una fuerza increíble que se manifiesta cuando siente furia. Perseguido por el ejército americano, encabezado por el General Ross (William Hurt), vive escondido en Brasil trabajando en una planta embotelladora mientras trata de buscar la forma de curarse y de controlar su ira. No obstante, un accidente en la planta hace que Ross descubra donde está y envíe un batallón a capturarlo comandado por Emil Blonsky (Tim Roth), un oficial cedido por las fuerzas británicas.

Banner logra escapar convertido en Hulk y decide regresar a EEUU para recuperar los datos de su investigación. Allí se reencuentra con su amada, Betty Ross (Liv Tyler), hija del General Ross. Esta decide ayudarle a llegar a Nueva York, donde se encuentra un tipo con el que ha estado en contacto a través de internet que puede ayudarle a encontrar la cura y que responde al nombre de Mr. Blue; seudónimo tras el que se encuentra el doctor Samuel Sterns (Tim Blake Nelson), de la Universidad Empire State. Mientras, Blonsky, seducido por la inmensa fuerza y habilidad de Hulk, convence a Ross para que le administre un componente derivado del Suero del Supersoldado que le hace mas ágil y fuerte; pero que tendrá drásticas consecuencias en el futuro, cuando al entrar en contacto con los experimentos de Sterns, se convierta en un ser de caracteríticas parecidas a las de Hulk, aunque mas incontrolable: Abominación.

Hulk (Ang Lee, 2003), además de no rendir en taquilla tanto como se esperaba, fue una tremenda decepción; especialmente, para los fans de los cómics. Esto no solo provocó que se cancelara la secuela que se estaba preparando antes de que la película se estrenara, la cual estaba siendo escrita por James Schamus, sino que hizo que los derechos del personaje volvieran a Marvel Studios, la cual puso en marcha un nuevo proyecto que, aunque funcionara como secuela, no tendría nada que ver con la película de Ang Lee.

Esta película es lo que yo llamo secuela-reboot; de lo cual solo hay otro ejemplo, Punisher: War Zone (Lexi Alexander, 2008). Lo llamo así porque, además de ser un reinicio, es también una secuela; aunque de un film que no existe y del que lo único que vemos son unas cuantas escenas salteadas en los créditos iniciales.

En mi opinión, fue una jugada bastante buena. Por un lado, rompían con la anterior película y, por el otro, se ahorraban tener que contar de nuevo los orígenes del personaje y puede ir directamente a la acción.

Para mi, la película es muy buena y, desde luego, supera con creces a la película de Ang Lee; como adaptación y como película.

La dirección del francés Louis Leterrier es estupenda. La película está rodada de una forma impecable que da gusto, con un ritmo que nunca decae, unas escenas de acción y persecuciones de lo mas logradas y, sobre todo, una muy buena forma de dirigir a los actores, los cuales hacen un buen trabajo. Todo acompañado de un diseño de producción brillante y unos efectos especiales logradísimos.

Este nuevo Hulk es excelente. Realizado mediante CGI mediante la técnica de captura de movimientos (motion capture), el personaje está de lo mas logrado técnicamente. Aunque, lo mejor es, sin duda, su diseño; sobre todo, en su rostro, muchos mas fiero, amenazador y primitivo. El Hulk de la película de Ang Lee estaba muy bien hecho técnicamente, pero su diseño era una porquería, convirtiendo a La Masa en un gigante bobalicón con cara de gilipollas. El Hulk de esta película, en cambio, si es el Hulk de los cómics.

Ninguno de los actores de la anterior película repite en esta película. Con la excepción, claro está, de Stan Lee y Lou Ferringo –quién dio vida a Hulk en la famosa serie de Tv de los años 70 –, quiénes vuelve a hacer un cameo; en el caso de Ferringo, este llega a tener mas presencia que en el otro film, llegando a tener hasta diálogos.

Para esta nueva película se buscaron nuevos intérpretes y, desde luego, estuvieron muy acertados.

Comenzando por su protagonista, Edward Norton, quién interpreta a Bruce Banner de forma magistral. El tipo es un excelente actor y el trabajo que hace aquí es, desde luego, maravilloso. Es una pena que el actor no repita en Los Vengadores; menos mal que su sustituto, Mark Ruffalo, está cumpliendo –al menos, eso dicen –.

Aunque, la aportación de Norton en esta película no es solo a nivel interpretativo, ya que también colaboró en el guión de la película; aunque esto no sale reflejado en los títulos de crédito, donde solo aparece Zak Penn acreditado como guionista.

Por lo demás, Liv Tyler está fantástica como Betty Ross, William Hurt interpreta al General Ross de una forma impresionante y Tim Roth, actor muy habituado a los roles de villano, hace honor a su reputación dando vida a un Blonsky tan inquietante y amenazador como su alter ego, Abominación.

Al igual que Hulk, el personaje de Abominación también está muy logrado técnicamente. El diseño, no obstante, difiere mucho del de los cómics; pero esta libertad se puede pasar por el alto en vista de los buenos resultados.




Aviso de SPOILERS a partir de ahora.




En la película también aparece otro de los principales enemigos de Hulk, el conocido como el Líder.

Bueno, solo vemos a su alter ego, el doctor Samuel Sterns, interpretado por el actor Tim Blake Nelson, pero al final podemos ver como, al entrar en contacto con sus experimentos, empieza a crecerle el cerebro; síntoma de que se está convirtiendo en el Líder.

Tan solo es una escena muy corta y no sabemos que ocurre después con él. Aunque, recientemente, en los cómics Avengers Prelude: Fury´s Big Week, los cuales cuentan lo que ocurre entre las distintas películas que preceden a Los Vengadores, vemos como Sterns, convertido ya en el líder, es capturado por la Viuda Negra (Scarlett Johansson) –que no aparece en la película, aunque el cómic nos desvela que ella está presente en varios momentos de la trama –, que llega allí poco después de que Abominación escape destrozando el laboratorio, y termina prisionero en las instalaciones de SHIELD.

Con esto sabemos que el Líder está vivo, al igual que Abominación –de quién si sabemos su destino en la película –, y puede ser un buen villano para una nueva película de Hulk en solitario tras su encuentro con los Vengadores. Todo se verá.




Fin de los SPOILERS.




Sobre las demás relaciones de la película con Los Vengadores, cabe decir que esta es la única de las predecesoras del film de Joss Whedon que no está distribuida por Paramount Pictures, sino por la Universal, la cual poseía antes los derechos de Hulk y fue la que produjo la película de Ang Lee. Esta se reservó una participación tras venderle los derechos a Marvel y así pudo distribuir la película, la cual fue producida, esta vez, por Marvel Studios.

Otra de las diferencias es que aquí no hay cameo de Samuel L. Jackson como Nick Fury; aunque el nombre del personaje se puede leer en uno de los documentos que aparecen en una de las escenas de los créditos iniciales.

Luego está que la escena que enlaza con Los Vengadores, donde Tony Stark (Robert Downey Jr.), alter ego de Iron Man, va a ver al General Ross a un bar, no está al final de los créditos finales, como en las demás, sino justo antes de estos.

Y por último está el hecho de que otro actor va a interpretar a Bruce Banner y, además, Hulk tendrá un aspecto distinto.

Dejando todo esto a un lado, la película es muy buena. Como adaptación es de lo mas fiel. Yo he crecido leyendo cómics de Hulk y se de lo que hablo. Vale que en el guión se cambian cosas y la película se toma libertades –como el ya mencionado aspecto de Abominación –, pero, por lo demás, guarda bastante fidelidad y recuerda mucho a los cómics.

El trabajo que hace Louis Leterrier es de lo mas bueno. El tipo quiso haber dirigido Iron Man pero, al estar elegido Jon Favreau, tuvo que coger a Hulk. Y, vamos, no es por menospreciar el trabajo de Favreau con el hombre de hierro, pero Leterrier dirige bastante mejor; sobre todo, en lo que a escenas de acción se refiere.

Lo que no comprendo es como, teniendo todos los ingredientes para ser un gran éxito de taquilla, la película, con un presupuesto de 150 millones de dólares, solo hizo 135 millones en EEUU y 128 millones mas en el resto del mundo, haciendo un total de 263 millones de dólares; unas cifras que, aunque superiores, no se alejan mucho de las obtenidas por la película de Ang Lee.

Yo creo que el público –al menos, la mayoría de él –tenía aún en mente la decepción sufrida con la anterior película y pensaron que iban a ver mas de lo mismo. Eso y que el estreno de Iron Man todavía estaba muy cercano; no hay duda de que debían haber retrasado, o adelantado, el estreno un par de meses.

Porque, vamos, la película es bastante buena, disfrutable de principio a fin, y, sobre todo, una estupenda adaptación de cómis. Un film de lo mas recomendable, tanto a los fans de los cómics como para los que no los conocen.

Y, vamos, comparándola con la película de 2003, esta película sale ganando claramente, ya que es muy superior a aquella por mucho intelectual que haya por ahí defendiéndola como una película sesuda para gente inteligente cuando no es mas que un telefilm de mediatarde con efectos especiales.

De esa película de 2003 ya hablaré aquí cuando llegue el momento, porque le tengo bastantes ganas.