31 de julio de 2011

CAPITAN AMERICA: EL PRIMER VENGADOR (2011)

















Ya he visto Captain America: The First AvengerCapitán América: El Primer Vengador en España –, película que se estrenó en EEUU el pasado 22 de julio y que a España llegará el 5 de agosto. No obstante, como ya ocurrió con Green Lantern, yo no he querido esperar. Claro, que con Linterna Verde estaba mas justificado porque la película ha tardado mas de un mes en llegar a España y en el caso del Capitán América, solo había que esperar un par de semanas. Sin embargo, lo que yo llevo esperando para ver esta película es mucho mas que dos semanas. Creedme.

El Capitán América es un personaje que me encanta. He crecido leyendo sus cómics y disfrutando cada una de sus aventuras. Lo que mas me atraía de él era que provenía de la II Guerra Mundial, un periodo histórico que siempre me ha fascinado.

Una cosa que siempre me molestó era que, a diferencia de otros personajes, como Batman, Spiderman o Superman, el Capitán América aún no tenía su película. En 1990 fue llevado al cine de forma lamentable en un film terriblemente malo dirigido por Albert Pyun –del que, por cierto, ya hablé en este mismo blog –que no se le puede ni considerar adaptación; una basura de lo mas mediocre y absurda que no respeta ni lo mas mínimo los cómics del capitán. Después, hubo continuos rumores de que iban a hacer una nueva película muchos mas acorde con los cómics, pero pasaban los años y los rumores se quedaban en rumores.


Y así hasta que, por fin, Marvel se lanzó a hacer la tan esperada película del Capitán América. Encima, en un film que serviría como anticipo a un ambicioso proyecto de llevar al cine a Los Vengadores y que, además, estaría entremezclado con otros proyectos, como Iron Man o Thor ¿Que mas se puede pedir? Bueno, si, que hagan una buena película y una adaptación en condiciones. Afortunadamente, aquí no han defraudado.

Vayamos por partes.

La película comienza en la actualidad, cuando unos científicos encuentran algo enterrado en el hielo del Ártico. De ahí pasamos a 1942, cuando un misterioso individuo que responde al nombre de Red Skull (Hugo Weaving) y que trabaja al servicio de los nazis dirigiendo una organización conocida como HYDRA, busca en Noruega un extraño artefacto de forma cúbica que posee un inmenso poder. Lejos de allí, en Nueva York, Steve Rogers (Chris Evans), un joven enclenque, pero lleno de valor y coraje, quiere alistarse en el ejército y combatir en la guerra que en esos momentos el mundo está librando. Sin embargo, su forma física le impide ser alistado. La cosa cambia cuando el doctor Abraham Erskine (Stanley Tucci), un científico huido de la alemania nazi, se fija en él para un experimento que está realizando. Erskine hace que Rogers sea aceptado en el ejército e ingresa en el pelotón dirigido por el coronel Chester Phillips (Tommy Lee Jones) y Peggy Carter (Hayley Atwell), directora de la RSS, quién no tarda en sentirse fascinada por el valor y dedicación que demuestra Rogers a pesar de su condición física.

Finalmente, Rogers se presta al experimento de Erskine, consistente en administrarle en un laboratorio secreto una sustancia conocida como el suero de supersoldado y convertirse en el primero de un ejército de superhombres que cambien el rumbo de la guerra. El experimento es un éxito y Rogers adquiere una fuerza y habilidad sobrehumanas. Sin embargo, un espía de HYDRA mata a Erskine y destruye el laboratorio, evitando que se puedan crear mas supersoldados. El ser Rogers el único, hace que el gobierno no quiera utilizarlo en la guerra temiendo perderlo y lo utiliza, bajo el nombre de Capitán América, como elemento propagandístico para recaudar bonos de guerra. Esto cambia cuando Rogers decide desobedecer las órdenes y rescata a varios soldados prisioneros en un campamento de HYDRA; entre ellos, el sargento James “Bucky” Barnes (Sebastian Stan), que es amigo suyo. Esto hará que el Capitán América se convierta en el arma definitiva para acabar con Red Skull, que, ayudado por el poder del cubo cósmico, pretende dominar el mundo pasando hasta por encima de Hitler.

Capitán América: El Primer Vengador llega en medio de una pequeña controversia. Y es que se trata de un superheroe americano llamado Capitán América que, además, viste con los colores de la bandera de los EEUU, país que, precisamente, no es muy querido en gran parte del mundo. Esto ha hecho que en varios países se estrene solo con el subtítulo de El Primer Vengador, evitando así lo de Capitán América en el título.

Aunque, a mi lo que me está tocando las narices en todo este asunto son los comentarios que circulan por ahí tachando al personaje de patriotero y fascista y a la película de americanada –ni que la hubieran hecho los portugueses, no te jode –. Comentarios obra de una panda de charlatanes que van por ahí dándoselas de progres cagándose en todo lo que tenga que ver con EEUU. Los hay que están hasta dispuestos a apoyar a dictadores y terroristas solo por el hecho de ser enemigos de ese país, bochornoso.

Yo soy de las primeras personas en criticar a EEUU cuando comete barbaridades con su política exterior o cuando hace estupideces; como ahora, que están a punto de llevar al mundo a la ruina porque sus políticos no se ponen de acuerdo. Sin embargo, no soy alguien a quién le gusta criticar por criticar y cada cosa me gusta tenerla en su sitio. Además, siempre me informo antes de hablar, ya que no me gusta nada hablar desde el desconocimiento; cosa que si hace toda esta gente.


El Capitán América puede que comenzara siendo un superheroe patriótico, pero hay que recordar que fue creado en los años 40, en plena II Guerra Mundial, y la gente necesitaba mas que nunca creer en su patria. Después, tras la guerra cayó en el olvido hasta que, en los años 60 fue recuperado por Stan Lee quién, aunque mantuvo el nombre y el traje, lo reconvirtió en un personaje prácticamente nuevo que, en ocasiones, llega a enfrentarse a su propio gobierno. Sus historias solían utilizarse muchas veces para denunciar la corrupción política y los abusos de poder que en muchas ocasiones ha hecho gala el país de las barras y estrellas. Buenos ejemplos de ello son los cómics de Ed Brubaker, donde se hace una dura crítica al capitalismo cuando Red Skull intenta hacerse con el poder en EEUU utilizando la reciente crisis financiera, o Civil War, donde el capi se convierte en un renegado al oponerse a una nueva ley del gobierno que obliga a los superheroes a registrarse.

Además, si miraran mas allá de sus narices verían que el Capitán América representa, por encima de su traje y su nombre, unos valores que los americanos, emborrachados de poder, han ido perdiendo a lo largo de los años y que no vendría de mas que los recuperaran ahora, que es cuando mas falta les hace.

Así que esos charlatanes deberían informarse mejor antes de criticar por criticar, porque lo único que están logrando es quedar como unos ignorantes. Por mi se pueden ir a la mierda todos. Ya veremos cuando el mundo lo dominen los chinos, que es lo que va a suceder dentro de poco, si les gusta el panorama.

Pero, bueno, dejemos estas gilipolleces a un lado, porque a esta gente lo mejor es no darle coba, y vamos a lo que importa: la película.

A mi, desde luego, me ha ENCANTADO.

Ha cumplido todas mis expectativas. No las ha superado, como hiciera en su día Batman Begins, pero no me ha defraudado casi nada; tan solo en unos aspectos sin importancia de los que hablaré mas adelante.


Desde luego, la película es muy buena. Este año se han estrenado buenas películas de superheroes (Thor, X-Men: First Class, Green Lantern), pero todas quedan pequeñas comparadas con este estupendo film que me ha hecho disfrutar desde que empieza hasta que termina.

Para empezar, el director Joe Johnston hace un excelente trabajo. El tipo es un director muy bueno, a pesar de que tenga en su curriculum la mediocre Parque Jurásico III (2001) –aunque, como digo siempre, él no fue el principal responsable de aquel desastre –, y esta es, sin duda, su mejor película.

El ritmo nunca decae, las escenas de acción son realmente espectaculares y están de lo mas logradas y muy bien rodadas. Tampoco los efectos especiales se quedan atrás. Aunque, lo que de verdad me ha maravillado de la película es su diseño de producción, el cual es excelente. Recrea muy bien la época en que se desarrolla la película pero, a la vez, le da ese toque retro-futurista tan propio de los cómics y que a mi, particularmente, me encanta. Es impresionante. Vemos a los soldados de HYDRA disparando armas láser –fabricadas con la energía del cubo cósmico –, vehículos, como tanques o un tren, de diseños bastante contemporáneos que no desentonan nada en el film y, sobre todo, un impresionante bombardero que, además, sirve como nave nodriza a otros minibombarderos y que es, sencillamente, genial.

El diseño del traje del héroe me encanta. Ya desde que salieron las primeras imágenes de arte conceptual me gustó. Es un traje que difiere del traje original pero, aún así, yo pienso que es mucho mas acertado. Se trata de una especie de mezcla entre el traje de los cómics con el que llevaban los soldados americanos en la II Guerra Mundial, con casco y todo. No lleva las famosas alitas en la cabeza –bueno, si, las lleva pintadas, pero solo eso –ni las escamas anti-bala en la parte superior; cosa que agradezco, porque esos elementos han sido siempre lo que menos me ha gustado del personaje.


El problema es que habrá mucho purista que preferirá un traje como el original. Y yo creo que a esa gente van dedicadas las escenas de los bonos de guerra, donde el protagonista lleva puesto un traje muy parecido al de los cómics que le queda RIDICULO, así como lo leéis. Y es que hay que recordar que no es lo mismo un cómic que una película y que lo que puede quedar bien en las viñetas no siempre queda bien en el celuloide. Por ejemplo, Batman en las películas queda mucho mejor con un traje negro asemejado a una armadura que con el traje de tela gris, morado o azul de los los cómics. Otro buen ejemplo es Ojo de Halcón, que en el film de Los Vengadores, donde será interpretado por Jeremy Renner, lucirá un traje mas acorde con los cómics ultimate que con su traje morado original, algo que yo creo muy acertado; no es que no me guste el traje que lleva en los cómics originales, pero pienso que en una película quedaría bastante ridículo.

Y lo mismo digo con el Capitán América. Su traje original queda bien en los cómics, pero para la película es mucho mejor el traje que le han puesto en este film o el que le pondrán en Los Vengadores, del cual se han visto imágenes y también me ha gustado mucho.

A parte del traje, también está el actor. Reconozco que tuve mis dudas cuando escogieron a Chris Evans y, la verdad, no era el mejor candidato para este papel. Sin embargo, el tipo ha demostrado ser una buena elección. Es buen actor y en la película hace un estupendo trabajo, haciendo suyo el personaje desde el primer momento y dándole la personalidad que necesita.

Me sorprendió mucho cuando al personaje aún no se le ha administrado el suero del supersoldado, cuando es un enclenque y un canijo. Esto se hizo colocando el rostro de Evans sobre otro actor mediante CGI y, la verdad, la forma en que está hecho es realmente impresionante. Hay hasta primeros planos en los que a penas se notan los efectos y en ningún momento resulta poco creíble. Desde luego, deja pequeños al Schwarzenegger de Terminator Salvation o al Jeff Bridges de Tron Legacy.

Volviendo al tema del reparto.

Hayley Atwell, a parte de muy bella, hace un buen trabajo como Peggy Carter; además, tiene bastante peso en el film, no limitándose a ser un simple florero. También tiene mucha química con Evans, sobre todo, en la parte en la que él es todavía una enclenque y ella se muestra fascinada por el valor, el coraje y la dedicación que demuestra a pesar de sus limitaciones físicas.

Hugo Weaving está magistral como Red Skull. Su interpretación es excelente y su caracterización del personaje, muy asemejada al Red Skull de los cómics de Brubaker, es fantástica; el tipo hay veces que llega a dar miedo. Es, desde luego, de lo mejor de la película y uno de los mejores villanos que se han visto en los últimos años; supera, incluso, al Loki (Tom Hiddleston) de Thor. El maquillaje que lleva es también muy bueno, asemejándolo mucho mas a una calavera –nada que ver con el caratomate de la versión del 90 –. Lo único que no me llega a convencer es que no tenga una boca como la de las calaveras y siga teniendo labios. Con las modernas técnicas de maquillaje que hay ahora bien se podría haber hecho así. Pero, bueno, es un detalle bastante insignificante. Para mi su caracterización es muy buena.


Por lo demás.

Tommy Lee Jones está genial como Chester Phillips –aquí convertido en coronel en lugar de general –, demostrando una vez mas lo gran actor que es. Stanley Tucci también hace un buen trabajo como Abraham Erskine, lo mismo que Dominic Cooper como Howard Stark (el padre de Tony Stark) -cuya presencia en la película es mayor de lo que se esperaba -, Toby Jones como Armin Zola o Sebastian Stan como Bucky, aunque, a este último lo encontré un tanto desaprovechado; no obstante, algo me dice que lo van a recuperar para la futura secuela con un brazo menos.

Tampoco me olvido de los integrantes de los Comandos Aulladores; especialmente, Neal McDonough, cuya encarnación de Dum Dum Dugan es, sencillamente, magistral.

Pero, bueno, no todo en la película es bueno, también hubo cosas que no me gustaron. Una es la poquísima presencia que tienen en la película los nazis. Vale que el film se centra mas en HYDRA como villano principal, pero me hubiera gustado ver algunos cuantos nazis mas y, sobre todo, banderas del III Reich. En la escena en la que Red Skull recibe la visita de los oficiales nazis se ve que estos llevan la bandera como brazalete, pero parece como si quisieran ocultarla con la cámara en todo momento; ni tan siquiera se le ve la esvástica. Parece como si hubiera algo de censura con el tema de los nazis en la película. Afortunadamente, nos hinchamos a ver el símbolo de HYDRA por todas partes.

Otro punto negativo está en la escena final, la que enlaza con la esperadísima película de Los Vengadores. La escena no es mala, está muy bien, pero se pasa demasiado rápido y da un poco la sensación de estar metida con calzador; de hecho, se rodó en plena postproducción. Yo creo que debía haber sido un poco mas densa.

En esa escena vemos a la bella y estupenda Amanda Righetti, de quién supimos hace poco que aparece en la película encarnando a una agente de SHIELD y que tendrá también presencia en Los Vengadores.

No voy a revelar ningún SPOILER, ya que esto son suposiciones mías.

En la película no dicen en ningún momento quién es, pero yo creo que, tal y como se presenta ante el capi, confirmaría que se trata de Sharon Carter. Es, al menos, lo que me pareció a mi. Pero, bueno, recuerdo que esta es una suposición mía y me podría equivocar. Aunque son demasiadas pistas que dan a entender que podría ser ella Sharon Carter; cosa que, desde luego, a mi me encantaría, ya que esta chica me gusta mucho y pega bastante con el personaje.


Resumiendo.

Una película muy buena, disfrutable de principio a fin y que deja con ganas de mas. Como adaptación es estupenda. Cambia cosas de los cómics, no lo voy a negar, pero se mantiene muy fiel a estos. Desde luego, para mi es la película que el Capitán América se merecía, además de que es la mejor adaptación de cómic que se ha estrenado este año; y eso que las otras también son muy buenas.

A mi me ha encantado. No hay duda de que, cuando se estrene en España iré corriendo al cine a verla. He disfrutado mucho viendo al Capitán América en vivo en un film mucho mas que decente. Creo que me ha llegado a gustar mas, incluso, que las películas de Iron Man. Desde luego, no han podido escoger mejor película para enlazar con la esperadísima The Avengers que, viendo sus antecedesoras, no hay duda de que será la bomba.



Yo, desde luego, la recomiendo a todo el mundo. Tanto a los amantes de los cómics del Capitán América como a los que no se hayan leído un cómic suyo en la vida.






27 de julio de 2011

TRANSFORMERS: EL LADO OSCURO DE LA LUNA (2011)







Transformers: Dark of the MoonTransformers: El lado oscuro de la Luna en España –es la tercera entrega de esta exitosa saga iniciada en 2007 y que adapta los populares personajes de Hasbro. Michael Bay vuelve a hacerse cargo de la dirección y Steven Spielberg de la producción ejecutiva y repite el reparto de la primera salvo una importante ausencia que ha intentado ser suplida; aunque no con mucho acierto.

La película comienza a principios de los años 60, contándonos que las verdaderas razones de la carrera especial y la llegada del hombre a la luna era inspeccionar un extraño artefacto extraterrestre que cayó allí. Este artefacto es una nave autobot que, en plena guerra entre autobots y decepticons, fue derribada llevando en su interior un arma importante que podría cambiar el rumbo de la guerra. En la actualidad, Optimus Prime (voz de PeterCullen), líder de los autobots, descubre el paradero de esa nave y que los humanos lo sabían y no dijeron nada. Por ello, no duda en ir en su búsqueda, ya que quién la capitaneaba era un pariente suyo, Sentinel Prime (voz de Leonard Nimoy), el único que sabe como activar esa arma.

Pero, una vez regresan a la Tierra y despiertan a Sentinel Prime, descubren que todo ha sido una trampa de los decepticons y que Sentinel es un traidor que hace tiempo pactó con Megatron (voz de Hugo Weaving). Expulsados de la Tierra por los líderes humanos, que ceden al chantaje de los decepticons, los autobots deben recurrir una vez mas a la ayuda de Sam Witwicky (Shia LaBeouf). Pero este se encuentra en un gran aprieto, ya que su novia, Carly Spencer (Rosie Huntington-Whiteley), ha sido secuestrada por su jefe (Patrick Dempsey), un humano que trabaja para los decepticons.

Como era de esperar, la película está arrasando en taquilla. Con un presupuesto de 195 millones de dólares, lleva recaudados 327 millones solo en EEUU y su recaudación mundial asciende a 884 millones de dólares. Pero, como ya he dicho, esto era de esperar. Lo sorprendente aquí es que la crítica, que machacó sin piedad las dos primeras entregas, está recibiendo esta bastante mejor que aquellas; diciendo que, incluso, es la mejor de la saga y todo.

Y, cuando los críticos se muestran favorables con una película de este tipo, yo me temo lo peor.

Al ver la película me he dado cuenta de que la razón de que la crítica se muestre mas entusiasta con esta que con las otras es que aquí han querido lamerles el culo; algo que esa gente valora muy bien. Igual que un restaurante cuando se da cuenta de que tiene a un crítico gastronómico entre sus comensales hace que todo el servicio se vuelque con él y lo traten como un marqués, aquí pasa algo parecido.

Y es que cada vez los críticos –esos que en su día despreciaron a Alfred Hithcock –, se sienten como dioses y no quieren mas que los alaben y los mimen en todo momento. Y eso ocurre en todos sitios, incluido España.

Os voy a poner un ejemplo. Las dos primeras películas de Torrente, Torrente, el brazo tonto de la ley (1998) y Torrente 2: Misión en Marbella (2001), fueron recibidas con buenas críticas –al menos, por los críticos españoles –. Sin embargo, cuando se estrenó la tercera, Torrente 3: El Protector (2005), la crítica, practicamente, la machacó ¿Que pasó entonces? Porque yo no creo que la tercera fuera mas mala que las otras dos –de hecho, para mi son todas igual de malas –. Lo que pasó es que Santiago Segura, director y principal responsable de esta saga, se negó a hacer un pase especial para los críticos –lo que incluye dejarles ver la película por todo el morro y luego invitarles a cenar en el mejor restaurante de Madrid –, cosa que si hizo en las dos primeras.

Lo que viene ahora es pura especulación y no tengo pruebas de ello, que conste. Pero, si hacemos cálculos, vemos que:



LAS DOS PRIMERAS ENTREGAS + PELICULA Y CENA GRATIS = BUENAS CRITICAS



Mientras que:



TERCERA ENTREGA – PELICULA Y CENA GRATIS = MALAS CRITICAS



A mi no se me dan muy bien las matemáticas, pero creo que ha quedado un poco claro cual es el criterio que siguen los críticos. Y no solo de los españoles porque, como ya he dicho, esto ocurre en todo el mundo.

Volviendo a esta película, no se si habrán invitado a los críticos a cenar o no, pero lo que si he visto es que han intentado pelotearles de lo lindo dándole al film un toque mas serio tratando de evitar una nueva avalancha de malas críticas, como ocurrió hace dos años con la segunda entrega, Transformers: La Venganza de los Caídos (2009), que hasta llegó ha ganar en los razzies de ese año por encima de Dragonball Evolution (James Wong, 2009), la cual debía haber sido la mas justa ganadora de esa edición; algo que me terminó de demostrar que esos premios son mas basura que la que dicen criticar con sus galardones.

Sin embargo, es ese toque serio lo que mas ha perjudicado a la película. Primero, porque desentona mucho con la saga y, segundo, porque contrasta mucho con las payasadas que suelen ir saliendo –sobre todo, las que protagonizan los padres del protagonista; aquí completamente metidos con calzador –, tanto en esta como en las demás películas. Las payasadas son algo que para mi sobra en esta saga y lastran mucho las películas, pero en este film es donde deberían haber sido completamente erradicadas al haberle querido dar un toque mas serio. Porque, la verdad, queda ridículo.

Otra de las razones en las que falla esta película es que, al haberla querido hacer mas seria, se aleja del estilo de la saga. Porque, una de las razones de que la primera entrega, Transformers (2007), me gustase mucho en su día es que en ningún momento trataba de ocultar lo que era: un blockbuster veraniego. Porque eso es lo que es esta saga y para lo que ha sido concebida, no se le puede pedir mas. L@s que van a ver estas películas no buscan ver El Padrino o Taxi Driver, buscan diversión, entretenimiento, chic@s guap@s, efectos especiales y unas escenas de acción que les hagan saltar de la butaca. En resumen, pasar un buen rato que les haga evadirse, al menos durante unas horas, del mundo real, cada vez mas cargado de problemas y obligaciones. Y si todo eso se lo sirven en una buena película, muy lograda y muy bien trabajada –como lo fue la primera entrega –, mejor.

Yo siempre he dicho que cada película es buena o mala dentro de lo que es; en este caso, los blockbusters veraniegos, que los puede haber buenos y malos, pero todos han sido hechos para un mismo propósito. Por ello esta película traiciona por completo el espíritu de esta saga al intentar ser lo que no es e intentar meterse en el mundo de los críticos y los gafapasta, un mundo donde, por mucho que disimulen, nunca serán aceptados; como los nuevos ricos cuando intentan ingresar en la alta sociedad.

Por estas razones, para mi este es el episodio mas flojo de la saga.

Lo cual no quiere decir que no me haya gustado del todo. A pesar de este inútil intento de cambiar de rumbo, la película, al menos, cumple con su público habitual y nos vuelve a ofrecer una buena ración de efectos especiales muy logrados, unos estupendos robots –a pesar de que su diseño difiere cada vez mas de los Transformers originales –y, sobre todo, unas escenas de acción realmente alucinantes. En lo que espectacularidad y acción se refiere, aquí si la película aprueba con nota y supera a las dos primeras entregas. No la he visto en 3D pero, por lo que he visto, aquí encajarían muy bien.

Luego está el tema de los personajes. Los actores que repiten de las anteriores entregas siguen en su salsa. Shia LaBeouf continúa haciendo el ganso –lo que mejor se le da –, Josh Duhamel vuelve a estar correcto como líder militar y John Tuturro sigue aportando muy bien el lado surrealista a la historia. En cuanto a los nuevos, Frances MacDormand y John Malkovich hacen un trabajo excelente, demostrando que son dos estupendos actores; aunque, en el caso de Malkovich, su personaje se lo podrían haber ahorrado.

John Malkovich si podría haber sido un excelente villano, ya que en este film introducen el tema de los humanos aliados con los decépticos. Sin embargo, lo desaprovechan completamente con ese personaje tan irreverente que llega a resultar insoportable y, en su lugar, me ponen a Patrick Dempsey, que interpreta a un villano lamentable en un papel que le viene grande por todos lados. Además, la pelea final que tiene con LaBeouf es realmente bochornosa.

Ahora vamos con la nueva, Rosie Huntington-Whiteley, modelo de Victoria's Secret que debuta en el cine y que fue elegida para sustituir a Megan Fox tras la polémica salida de esta –de la cual no voy a hablar porque ya se han escrito ríos de tinta –.

A simple vista, la verdad, Megan y Rosie se diferencian poco. Las dos son muy bellas, un auténtico regalo para la vista cada una, y, aunque no son del todo buenas actrices, al menos, se esfuerzan por intentar hacer un buen trabajo. Es al entrar en acción cuando se notan de verdad las diferencias. Megan se metía de lleno en las escenas de acción y, a veces, llegaba a resultar mas temeraria que los propios soldados y mas dura que los propios robots. Rosie, en cambio, a parte de que parece que se va a romper en cualquier momento, se pasa la mayor parte del tiempo gritando en los rincones y es solo al final cuando hace verdaderamente algo. Megan era una heroína, mientras que Rosie es la damisela en apuros.

Yo lo siento por Rosie. La chica está muy bien y me ha llegado a gustar. Pero, en mi modesta opinión, no es la indicada para sustituir a Megan. No logra estar en ningún momento a su altura y, desde luego, no consigue hacer que la olvide, ya que me pasé toda la película acordándome de ella -y de la madre de Bay, también -y deseando que apareciera en cualquier momento; se que no es bueno hacerse ilusiones, pero bueno.

De hecho, cuando salía de ver la película, en mi mente fui visualizando un final alternativo para la película, mucho mejor y mas a mi gusto, donde estaba ella implicada. Pero, de eso mejor no hablo que ya me estoy enrollando demasiado, no aporta mucho a este análisis y... y...

¡Que demonios! El final que imaginé era este:

Durante la batalla final, el personaje de Rosie se encuentra en peligro y está a punto de morir. El sosainas de LaBeouf no acude a rescatarla porque está demasiado ocupado con la pelea de nenas que mantiene con Dempsey, durante la cual les cae encima un trozo de edificio y los aplasta a los dos. Es entonces cuando aparece Megan a lomos de una Harley Davidson y, tras ayudar a los autobots a derrotar a los decepticons, rescata a Rosie, la agarra bien fuerte y le pega un morreo en los labios que ríete del que le da a Amanda Seyfried en Jennifer´s Body. Después, la monta en la moto y las dos se marchan de allí juntas alejándose en la moto por una carretera con una bonita melodía de fondo.

Que bonito tener imaginación ¿no?

Este si que hubiera sido un buen final para la película –al menos, para mi –. Claro, que el verdadero no está mal, aunque es bastante tópico y previsible, además de precipitado.

Resumiendo.

Una película buena y lograda que acierta de lleno en la acción, la espectacularidad y el aspecto técnico. Pero que, sin embargo, a nivel argumental falla al intentar introducir un toque serio, que, para nada, va con este film ni con la saga a la que pertenece. La entrega mas floja de la saga, pero no defraudará a quienes busquen acción a raudales y espectacularidad por todos lados. Totalmente recomendable a los que disfrutaron con las anteriores películas.

La dirección de Michael Bay vuelve a estar tan acertada como en los otros films. Sin embargo, hay momentos en los que se la ve algo forzada. Está claro que el tipo está verdaderamente cansado de esta saga; algo normal, ya que lleva dedicándose a ella los últimos 6 años. Él ya ha dicho que no piensa seguir después de esta película; lo mismo que LaBeouf –aunque este debió irse antes de los créditos iniciales de la primera entrega – . Claro, que la Paramount ya ha dicho que piensa continuar con la saga con o sin él. El nombre de David Yates –director de las últimas entregas de Harry Potter –y hasta del mismo Steven Spielberg ya suenan como posibles sustitutos.

Yo a la Paramount les recomendaría que fueran mas listos y dejaran reposar la saga unos cuantos años, porque, la verdad, está empezando a ser abrumadora. Así, a lo mejor, podrían seguir contando con Bay en el futuro, porque dudo mucho que otro director sea capaz de darle las mismas dosis de espectacularidad y el ritmo trepidante que Bay le ha administrado.


Ya se que no es bueno hacerse ilusiones, pero bueno.